Este domingo Hibatulá Akhundzada, el jefe supremo Talibán en Afganistán ordenó prohíbir el cultivo de amapola en el país, y advirtió que se destrirán todos los plantíos que se descubran y se castigará a quiénes resulten responsables.
Actualmente Afganistán es el primer productor mundial de esta planta que produce el opio, con el que se fabrica la heroína, en 2021 produjo más de seis mil toneladas, que según la ONU podrían producir 320 toneladas de heroína pura.
“Todos los afganos están desde ahora informados, el cultivo de la amapola está estrictamente prohibido en todo el país”, señala el decreto del dirigente de los talibanes.
“En caso de violación del decreto, el cultivo será inmediatamente destruido y el culpable tratado según la sharia (ley islámica)”, indica el texto.
De acvuerdo con la ONU en 2021, los ingresos de los opiáceos en Afganistán fueron de mil 800 millones a dos mil 700 millones de dólares, más del siete por ciento del PIB del país.
La producción de amapola y los ingresos se utilizan a menudo como una forma de banca entre los más pobres de Afganistán, que utilizan la promesa de la cosecha del próximo año para comprar alimentos básicos como harina, azúcar, aceite de cocina y combustible para calefacción.
(Con información de La Jornada)