Turquía, una nación miembro de la OTAN, cerró el paso de los barcos de guerra de Rusia por el Mar Negro para impedir lleguen a Ucrania.

Diversas agencias noticiosas han señalado que si Rusia ataca contra la flota turca, se considerará un ataque directo contra la OTAN, lo que activaría el enfrentamiento contra todos los países miembros de esta agrupación internacional.

En respuesta el presidente de Ucrania, Velodímir Zelenski, agradeció la reacción de Turquía, por el apoyo militar y humanitario que calificó como extremadamente importantes en la actualidad y por ello el pueblo de Ucrania nunca los olvidará.

Por otra parte, Francia ha empezado a interceptar a los buques rusos para evitar ataques a Ucrania.