(CNN).- La decisión de una familia de enviar a su hijo a la escuela después de dar positivo por COVID-19 resultó en docenas de planes de Acción de Gracias cancelados para otros compañeros de clase, según un distrito escolar de California.

Los padres de un estudiante de primaria sabían que su hijo dio positivo por el virus pero continuaron enviándolo a la escuela durante siete días, dijo a CNN el médico Brett Geithman, superintendente del distrito escolar de Larkspur-Corte Madera en el condado de Marin.

El estudiante asiste a la escuela primaria Neil Cummins en Corte Madera, a unos 30 minutos al norte de San Francisco.

75 estudiantes en cuarentena
Las acciones de los padres resultaron en que alrededor de 75 compañeros de clase fueran obligados a ponerse en cuarentena a partir del 19 de noviembre.
Geithman dijo que los funcionarios escolares solo supieron del caso positivo después de que Salud Pública del Condado de Marin los contactó, porque nunca se informó en la base de datos de la escuela.

El departamento de salud pública tiene un proceso con todos los laboratorios de la zona para que se les notifique de nuevos casos. Luego hacen un seguimiento con la escuela para confirmar que el estudiante ha estado en cuarentena, dijo Matt Willis, funcionario de salud pública del condado de Marin.

“En este caso, tanto la escuela como la salud pública recibieron información inexacta de los padres, lo que llevó a un intervalo prolongado de exposición”, dijo Willis.

“Esto no es solo una violación de la ética básica, es una violación de la ley”, le dijo Willis a CNN. “La infracción puede dar lugar a una multa o un proceso penal como delito menor. Debido a la gravedad de esta infracción, hemos remitido el caso al Fiscal de Distrito”.
Pautas para padres
El distrito ha publicado pautas que instruyen a los padres sobre los pasos a seguir si un miembro del hogar ha dado positivo en la prueba de covid.

“No sabíamos que existía este caso positivo”, dijo Geithman en una declaración escrita al medio.

“Al llamar a la familia, nos enteramos de que el estudiante dio positivo en la prueba, no informaron a las escuelas y luego enviaron al estudiante y a su hermano a la escuela durante siete días”.

El Departamento de Salud Pública del Condado de Marin compartió una declaración escrita a CNN que decía: “Estas acciones son una violación del Manual para Estudiantes y Familias del Condado de Marin sobre Seguridad covid-19 y la Orden de Salud Pública de Aislamiento y Cuarentena del Condado de Marin, que requiere que todas las personas que hayan sido diagnosticadas con covid-19 se aíslen durante al menos 10 días”.

El departamento fue informado por primera vez del caso positivo el 8 de noviembre por parte de un proveedor de atención médica. Cuando comenzaron el proceso de rastreo de contactos, la familia no proporcionó el nombre de la escuela a la que asiste el niño en la primera llamada, dijo Geithman.

Se hicieron varios intentos para pedirle a la familia que informara el nombre de la escuela, pero no devolvieron esas llamadas, agregó Geithman. Cuando el departamento de salud finalmente descubrió el nombre de la escuela, notificaron a los funcionarios escolares.

Lo que hizo la escuela
Geithman mencionó que el personal de la escuela primaria Neil Cummins actuó de inmediato.

Notificaron a todos los que fueron expuestos enviando un mensaje de texto a los padres la noche del 18, pidiéndoles que llevaran a sus hijos para hacerse la prueba a la mañana siguiente.

“La directora, la enfermera y yo evaluamos aproximadamente a 50 estudiantes y 10 miembros del personal la mañana del 19 en nuestro gimnasio”, mencionó Geithman.

De las pruebas, se quedaron con ocho casos en total. Dos de ellos eran el niño inicial y su hermano, mientras que tres eran sospechosos de transmisión escolar y los otros tres, del hogar.