Le levantan cargos por narcotráfico en el Distrito de Arizona y ofrecen hasta 5 millones de dólares de recompensa por información que permita atraparlo y llevarlo a una Corte.
El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció el viernes pasado una recompensa de hasta 5 millones de dólares por información que conduzca al arresto o condena de cuatro narcotraficantes mexicanos que operan en los estados mexicanos de Chihuahua y Sinaloa, entre los que se encuentra Aureliano Guzmán Loera, hermano del Chapo Guzmán.
De acuerdo a un boletín de dicha dependencia, el Guano y los hermanos Ruperto Salgueiro Nevárez, José Salgueiro Nevárez y Heriberto Salgueiro Nevárez operan bajo la protección del Cártel de Sinaloa.
Aureliano Guzmán Loera y los hermanos Salgueiro Nevárez están acusados de violar las leyes de drogas de Estados Unidos, que incluyen conspiraciones internacionales para distribuir mariguana, cocaína, metanfetamina y fentanilo.
Una de las acusaciones alega que el tráfico de fentanilo, que es responsable de más del 63 por ciento de las 96 mil 779 muertes por sobredosis de drogas en los Estados Unidos entre marzo de 2020 y 2021.
Las acusaciones y la oferta de recompensa “son parte de un esfuerzo de todo el gobierno para combatir narcotráfico y crimen organizado transnacional a nivel mundial y en México”, dice el comunicado.
Esta recompensa se ofrece bajo el Programa de Recompensas por Narcóticos (NRP) del Departamento de Estado.
Más de 75 delincuentes trasnacionales y grandes narcotraficantes han comparecido ante la justicia en virtud del NRP y el Programa de Recompensas contra la Delincuencia Organizada Trasnacional (TOCRP) desde el inicio del NRP, en 1986.
El Departamento ha pagado más de 135 millones de dólares en recompensas por información que conduzca a detenciones.
La Oficina de Asuntos Internacionales de Narcóticos y Aplicación de la Ley administra el NRP en estrecha coordinación con la Administración de Control de Drogas, la Oficina Federal de Investigaciones, las Investigaciones de Seguridad Nacional del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos y otras agencias gubernamentales de ese país.
Estas acciones demuestran el compromiso del Departamento de apoyar los esfuerzos de aplicación de la ley para llevar ante la justicia a los delincuentes trasnacionales.
La acusación se integró desde el 19 de febrero de 2020 y se emitió en el Distrito de Arizona el 4 de noviembre de este año.
Es la primera vez que al Guano es involucrado en una acusación por tráfico de drogas, a pesar de que tiene ya décadas en el negocio. Es mayor que Joaquín Guzmán tres años pero ha mantenido siempre un bajo perfil.
Prácticamente toda la familia del Chapo Guzmán ha sido boletinada por las agencias norteamericanas por presuntamente violar sus leyes sobre drogas: sus ex esposas Alejandrina Salazar y Griselda López Pérez, su esposa actual, Emma Coronel, sus hijos Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, Ovidio Guzmán López….
Y el propio capo de La Tuna fue juzgado en los Estados Unidos y sentenciado a cadena perpetua en julio de 2019.
Según fuentes federales, tiene su base en el triángulo dorado, donde antes dominaba su hermano Joaquín. El gobierno norteamericano lo acusa de ser parte de una red criminal que importa precursores químicos para la producción de drogas sintéticas, sobre todo fentanilo.
El fentanilo está haciendo estragos entre los adictos gringos. Solo en 2016 murieron 160 mil estadounidenses por sobredosis de opiodes, principalmente fentanilo. Los efectos en los consumidores son devastadores.
Hasta donde se tiene conocimiento, ni en Sinaloa ni en México hay una investigación contra Aureliano Guzmán, por ningún delito.
Artículo publicado el 07 de noviembre de 2021 en la edición 980 del semanario Ríodoce.