Los restos del estudiante Jhosivani Guerrero de la Cruz, uno de los 43 normalistas de Ayotzinapa, fueron identificados, según dieron a conocer laboratorios de Innsbruck.
Vidulfo Rosales, vocero de los padres de los normalistas, confirmó la información y aseguró que es un resultado contundente, porque fueron los restos encontrados en la barranca de la carnicería, a unos kilómetros del basurero de Cocula, informó Eje Central.
Sin embargo, desde el 2015, la entonces Procuraduría General de la República (PGR) había dado a conocer que los restos de Guerrero de la Cruz, localizados en el Río San Juan, habían sido identificados por los peritos de la Universidad de Innsbruck, los mismos que ahora.
Pese a eso, el abogado asegura que no se había verificado dicha información: “las verificaciones que se hicieron no tenían certeza científica, nunca tuvieron certeza científica, no se puede validar ese primer…”, resaltó.
Rosales dio a conocer que se trata de una vértebra lumbar, que fue encontrada gracias a las búsquedas que se han dado desde noviembre de 2019 en la zona.
Hace seis años, Arely Gómez, entonces procuradora General de la República, señaló que habían sido los mismos laboratorios de Innsbruck los que habían analizado y confirmado la relación de los restos del estudiante con su madre, la señora Martina de la Cruz.
En 2018, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ordenó a las autoridades federales y locales, realizar las pruebas necesarias a los restos hallados en el Vertedero de Cocula y en el río San Juan, en Iguala, Guerrero, donde se habría confirmado la identidad del estudiante Jhosivani Guerrero de la Cruz.