Mientras Estados Unidos superó los 30 millones de contagios de COVID-19, Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), señaló como una “fatalidad inminente” que se registre otra nueva escalada de casos.

En una rueda de prensa, la funcionaria pidió a los funcionarios públicos y a otros que difundan la gravedad de la situación, en un intento por prevenir una cuarta ola, debido a que los contagios se incrementaron 10 por ciento comparado con el promedio de siete días previos cuando se registraron alrededor de 60 mil casos por día, y de que las hospitalizaciones también subieron y las muertes comenzaron a aumentaron.

“Voy a saltarme el guión para reflexionar sobre la sensación recurrente que tengo de una fatalidad inminente”, dijo Walensky una comparecencia ante los medios. “En este momento tengo miedo”.

Walensky se refirió a los estados que abrieron sus economías y aflojaron las restricciones de forma prematura, junto con un aumento en los viajes, como razones para el alza, y añadió que la trayectoria de la pandemia en Estados Unidos parece similar a la de países europeos como Alemania, Italia y Francia, que han experimentado un aumento de contagios.

“No podemos darnos el lujo de la inacción. Por (…) la salud de nuestro país, debemos trabajar juntos ahora para prevenir una cuarta ola”, afirmó.

“Hay que aguantar”, dijo el experto en enfermedades infecciosas doctor Anthony Fauci. “Será una carrera entre la vacuna y lo que está pasando con la dinámica del brote, y podemos ganar esto aguantando simplemente un poco más”.