David “A” fue vinculado a proceso penal por el feminicidio de su mamá, cometido el 15 de febrero pasado en el fraccionamiento Montecarlo.
Durante la audiencia de hoy el juez dictó prisión preventiva que deberá llevar en un área especial del penal de Aguaruto y con los cuidados que requiere su condición mental.
De acuerdo con declaraciones de familiares David padece esquizofrenia pero estaba controlado y trabajaba y estudiaba segundo año de medicina.
Sus familiares dijeron que el año pasado en el IMSS dejaron de darle el medicamento que tomaba porque no había y se lo cambiaron por otro y fue a partir de entonces cuando empezó a tener episodios de esquizofrenia.
La víctima es María, de 58 años, asesinada a golpes el pasado 15 de febrero en su casa en el fraccionamiento Montecarlo.
En la audiencia del miércoles de la semana pasada, David estaba en estado somnoliento, en la de hoy estaba alterado
Al iniciar la audiencia de hoy el juez le pidió que diera su nombre y contestó que no, el juzgador insistió: “tiene que dar su nombre, por favor” y David se volteó hacia un lado y preguntó dónde estaba su papá.
El abogado intentó convencerlo para que dijera el nombre pero no decía nada hasta que solo dijo David, sin mencionar los apellidos.
En el transcurso de la sesión se quitó la camisa, luego la arrojaba al suelo, la juntaba y la volvía a tirar, aventó con los pies las sandalias e interrumpía constantemente.
En una ocasión se levantó de repente y alcanzó a dar uno pasos y levantó ambos brazos pero los agentes que lo resguardaban alcanzaron a agarrarlo y regresarlo a su lugar. En ese momento los policías pidieron refuerzos y había seis elementos en la sala custodiando.
El imputado de repente gritaba que sacaran de la sala a su papá, en varias ocasiones también pidió que “saquen a ese señor” señalando al juez y constantemente gritaba “protesto, protesto”.
Mientras la fiscal hablaba David gritaba “guarde silencio, no podemos hablar los dos al mismo tiempo”.
En varias ocasiones interrumpió la audiencia para decir “denme el acta de nacimiento de David”, “denme el acta de nacimiento de sus padres”.
La defensa pretendía que David fuera declarado inimputable por su condición mental.
Según un peritaje siquiátrico no está orientado en tiempo y lugar, tiene discurso incongruente, bloqueos de pensamiento frecuentes, su juicio es fuera de la realidad, y no tiene capacidad para entender el carácter lícito o ilícito del hecho que cometió.
Los peritos particulares concluyeron que no debe ser considerado responsable por su enfermedad.
La defensa pidió al juez que el imputado fuera internado en una institución siquiátrica.
El juez resolvió que el peritaje que presentó la defensa era insuficiente para declararlo inimputable.
Para aplicar las excluyentes del delito, dijo, debe estar demostrado de manera indudable que no tiene capacidad para discernir entre lo legal y lo ilegal.
En otra etapa del proceso, indicó, podrá acreditarse de manera fidedigna si tenía capacidad para comprender su conducta.
