Lucio Rodríguez, íntimo de Caro Quintero, en la mira de EU desde 2015

LUCIO RODRÍGUEZ. Brazo derecho de Caro.

El Departamento del Tesoro de Estados Unidos reveló la semana pasada el nombre de Lucio Rodríguez Serrano como uno de los supuestos socios del narcotraficante Rafael Caro Quintero.

Lea: La DEA no olvida a ‘Kiki’ Camarena; va a la caza de Caro Quintero https://bit.ly/36VH5QA

Los delitos por los que se acusa a Rodríguez Serrano, de 74 años, sin embargo, se mantienen como material clasificado, y no fue sino hasta que la Oficina para el Control de Bienes Extranjeros (OFAC) emitió un boletín donde lo señalaban como uno de los principales operadores de Rafael Caro Quintero, que el supuesto socio del narcotraficante fue identificado.

“Es originario de un lugar conocido como Guanajuato”, alcanza a reconocer otro de los boletines del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, al tiempo que lo ubica como el encargado de todas las actividades ilícitas del capo, pero además es quien lo alerta y ayuda a evadir la justicia americana.

“Caro Quintero y Rodríguez Serrano han sido amigos de toda la vida, y no sólo lo ha ayudado a escapar, sino que se ha convertido en su principal operador en transacciones relacionadas con bienes y raíces, todo en beneficio de Caro Quintero”, se lee en un boletín de la OFAC.

Fuentes de Ríodoce asentadas en varias de las comunidades de Badiraguato sólo tartamudeaban cuando escuchaban el nombre de “don Lucio”, como se refieren a él, y aunque la mayoría negó siquiera conocerlo, hubo un residente de la zona que dijo que “don Lucio” no se encarga de la seguridad del capo, sino que tiene gente que lo cuida.

“La mera verdad es que toda la gente de esa parte de Badiraguato: Guanajuato, La Noria, Babunica, Santiago (de los Caballeros), Tameapa, todos protegen a don Rafa, porque él ayuda a la gente, y pues el otro señor ya está grande; no anda en esas cosas”, dijo una de las fuentes consultadas.

En mayo de 2018, después de una embestida de la Armada de México en los pueblos de Las Juntas, Bamopa y Babunica, Caro Quintero logró burlar a los militares, y según la DEA, habría sido la gente de don Lucio quien lo alertó y finalmente lo rescató para que este escapara.

Desde entonces, poco se ha sabido del capo, y el Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ) junto con el Tesoro, han iniciado una serie de acciones para capturar, o al menos mermar la organización criminal que dirige “don Rafa”.

“Queremos atraparlo porque sus años como traficante han costado la vida de vidas americanas, y el compromiso principal es atraparlo y traerlo a que enfrente la justicia americana”, dijo en un comunicado Steven T. Mnuchin, Secretario del Tesoro.

A estás alturas en el comunicado, el nombre de Lucio Rodríguez Serrano, ya casi no se menciona, y sólo se lee el nombre de Caro Quintero y el de Enrique Camarena, y cómo fue “muerto y brutalmente torturado por el capo”.

Pero aunque hasta ahora reconozca el gobierno americano, a Lucio Rodríguez lo traen en la mira desde mucho antes. Ríodoce registró en agosto de 2015 en Barrio de Guanajuato, luego de una operación de la Marina donde los pobladores aseguran que había presencia de oficiales “gringos” en ella, que la única persona por la preguntaron en la operación era por Lucio y su casa.

–Llévame a la casa de Lucio, le dijo uno de los Marinos que descendió a rapel de un helicóptero al primer poblador que se encontró. Le mostró en una tablet imágenes satelitales de la casa de Lucio.

El actual administrador de la DEA, Timothy J. Shea, muestra el énfasis de su objetivo al señalar que la prioridad de ellos es capturar a Caro Quintero más que a cualquier otro narco mexicano, puesto que fue quien torturó y provocó la muerte de Kiki Camarena en 1985, y por ello “la DEA no descansará hasta que lo tengan en su poder”.

“Es personal”, dijo la misma persona de Badiraguato que enfatizó que en la sierra todos protegían a Caro Quintero: “Ya no se trata de hacer justicia, sino de agarrarlo y llevárselo al otro lado para que allá lo juzguen”.

Rafael Caro Quintero habría iniciado su carrera criminal a finales de la década de los 70s, y poco después formó el cártel de Guadalajara junto con los narcotraficantes Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo.

Fue capturado en San José Costa Rica en 1985 tras la muerte de Camarena, y tras 28 años en cárceles de máxima seguridad en México fue liberado luego de una serie de inconsistencias en su caso.

Inmediatamente después de su liberación, el gobierno mexicano emitió una nueva orden de aprehensión, y no fue hasta 2018 que Estados Unidos ofreció 20 millones de dólares a quien diera información que ayudará a su captura.

Apenas dos semanas atrás, y tras la repatriación del general Salvador Cienfuegos Zepeda, Estados Unidos dijo que Caro Quintero era su principal objetivo.

Artículo publicado el 06 de diciembre de 2020 en la edición 932 del semanario Ríodoce.

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