La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) desechó un recurso de reclamación promovido por Joaquín el Chapo Guzmán, quien buscaba revertir la orden de extradición a Estados Unidos, concretada el 19 de enero pasado.
En la sesión de este miércoles, la Primera Sala del alto tribunal del país abordó el recurso 712/2017, cuyo proyecto fue turnado al ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena.
La defensa de Guzmán Loera reclamó ante la SCJN que su cliente fue presentado ante una Corte de Nueva York y no ante una Corte de Distrito de California, como señalaba la orden de extradición por los delitos de narcotráfico y lavado de dinero.
Para desechar la petición del capo, quien ya enfrenta a la justicia estadounidense, los ministros de la Primera Sala coincidieron en que la Suprema Corte no es legalmente competente para conocer el asunto.
El recurso de reclamación buscaba echar abajo los argumentos de la propia Corte, sobre los actos realizados por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la Procuraduría General de la República (PGR) y la Comisión Nacional de Seguridad consistentes en la extradición del Chapo.
El narcotraficante fue extraditado en enero pasado a Estados Unidos, luego de permanecer recluido en el penal número 9 de Ciudad Juárez, Chihuahua, y posteriormente fue presentado ante una corte estadounidense para que se iniciaran los procesos jurídicos derivados de las seis acusaciones que se le imputan por narcotráfico y lavado de dinero.
Una magistrada vinculada con el caso del ex líder del Cártel de Sinaloa, quien espera por el inicio de su juicio por narcotráfico en una cárcel de Nueva York, recomendó que pueda tener contacto físico en las visitas de sus abogados, como había solicitado el capo mexicano.
Esta es sólo una recomendación, a la que la fiscalía del distrito de Brooklyn, que lleva el caso contra Guzmán, debe contestar, pero la decisión final recaerá en el juez que lleva la causa, Brian Cogan.
Cogan nombró el pasado mayo a la magistrada Roanne L. Mann para que revisara el reclamo de Guzmán, visitara la cárcel, lo que hizo en julio pasado, acompañada por representantes de la fiscalía y la defensa, y que le hiciera recomendaciones, que finalmente se conocieron hoy.
“El tribunal recomienda respetuosamente que el gobierno ordene permitir al acusado sostener visitas de contacto con sus abogados tan pronto como sea razonablemente posible, sujeto a razonables medidas de seguridad, que incluyen, a opción del Departamento de Corrección, encadenar al acusado”, indica el documento legal enviado a Cogan.
Hasta ahora el Chapo sólo puede comunicarse con sus abogados a través de paneles acrílicos, en cabinas individuales.
Sus abogados han reclamado que esas medidas, en las que sólo se le permite estar una hora fuera de su celda, les impiden preparar su defensa adecuadamente y que su cliente pueda revisar las voluminosas evidencias y grabaciones.
A Guzmán, que se había quejado de las condiciones de su encarcelamiento en México, no se le permiten visitas más allá de las reuniones con sus abogados, pero no tienen contacto físico ni llamadas telefónicas, y solo tiene una hora de ejercicio en solitario cada jornada.
Su abogado Jeffrey Lichtman ha calificado de “obscenas” las condiciones de encarcelamiento y dijo que en 27 años de oficio “nunca había visto nada así”.
