CULIACÁN.- Después de celebrarse los primeros 21 juegos de la temporada en la Liga Mexicana (siete series), el balance ha sido muy bueno sobre la asistencia en los diferentes parques de pelota.
En promedio de asistencias por juego, el único equipo que hoy tiene menos aficionados que el año pasado son los Pericos de Puebla al pasar de 4 mil 314 (2016) a 4 mil 150 (2017).
Todos los demás han aumentado sus asistencias, pero los más notables son Acereros de Monclova, Sultanes de Monterrey y Toros de Tijuana.
Los Acereros, ya con su nueva directiva, han registrado nueve llenos en sus nueve juegos en el Estadio Monclova, cuyo aforo es para 8 mil 500 espectadores.
Hay juegos en los que los Acereros han metido más de 9 mil aficionados, como en la inauguración y en la reciente serie contra los Pericos.
Eso nos indica que un estadio nuevo en Monclova detonaría por completo la euforia que se vive en dicha ciudad y es algo que Gerardo Benavides ya está visualizando, tal vez en un mediano plazo.
A su vez, los Sultanes han pasado de 12 mil 783 aficionados a 15 mil 666 —líderes en la liga—, lo que llama la atención, porque también tienen una nueva administración.
Los Toros siguen detrás de Monterrey, pero no dejan de incrementar sus asistencias. En el Gasmart han pasado de 9 mil 391 a 11 mil 719 y hoy más que nunca la directiva está viendo cómo aterrizar su proyecto de un nuevo parque, ya que el entretenimiento que brindan y la respuesta de los fanáticos así lo están demandando.
Cabe señalar que este comparativo en promedio de asistencias es tomando en cuenta el actual de la temporada 2017 con el que finalizaron la edición pasada.
Lo ideal hubiese sido comparar abril de 2017 con 2016, sin embargo, este ejercicio sirve como parámetro para darnos una idea de que la afición al béisbol se mantiene firme pese a todas las turbulencias que se dieron previo al arranque de campaña.
GIL… Los Tomateros de Culiacán anunciaron hace días el regreso de Benjamín Gil como mánager para la temporada 2017-18 de la LMP, luego de enviarlo un año a la banca.
La directiva primero lo anunció mediante un boletín y en sus redes, ya que tenían encima a la prensa y temían que alguien filtrara la información a equis medio en exclusiva.
De entrada los Tomateros tendrán que hacer una operación cicatriz con el regreso de Gil, ya que si no lo contrataron el pasado invierno fue porque tenía varios roces con los peloteros y en la perspectiva de la oficina “ya no le jugaban”.
Gil es inteligente y eso no se discute. Es un tipo agresivo para la estrategia y así fue como llegó el campeonato para los Tomateros en la 2014-15, luego de 10 años de sequía.
Sin embargo, entre menos hable mucho mejor, porque él ya no es jugador sino un mánager que, por sobre todas las cosas, debe mantener en armonía a los 28 jugadores del roster y a su cuerpo técnico.
Un líder no es aquel que habla más fuerte ni el que siempre tiene la razón. Un líder es aquel que acepta sus errores y logra sacar el máximo rendimiento de cada uno sus pupilos, además de mantenerlos motivados.
SÍGUEME EN TWITTER: @purobeisbolfb
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Monclova y sus nueve llenos consecutivos; el regreso de Gil a Tomateros
Por Fernando Ballesteros
CULIACÁN.- Después de celebrarse los primeros 21 juegos de la temporada en la Liga Mexicana (siete series), el balance ha sido muy bueno sobre la asistencia en los diferentes parques de pelota.
En promedio de asistencias por juego, el único equipo que hoy tiene menos aficionados que el año pasado son los Pericos de Puebla al pasar de 4 mil 314 (2016) a 4 mil 150 (2017).
Todos los demás han aumentado sus asistencias, pero los más notables son Acereros de Monclova, Sultanes de Monterrey y Toros de Tijuana.
Los Acereros, ya con su nueva directiva, han registrado nueve llenos en sus nueve juegos en el Estadio Monclova, cuyo aforo es para 8 mil 500 espectadores.
Hay juegos en los que los Acereros han metido más de 9 mil aficionados, como en la inauguración y en la reciente serie contra los Pericos.
Eso nos indica que un estadio nuevo en Monclova detonaría por completo la euforia que se vive en dicha ciudad y es algo que Gerardo Benavides ya está visualizando, tal vez en un mediano plazo.
A su vez, los Sultanes han pasado de 12 mil 783 aficionados a 15 mil 666 —líderes en la liga—, lo que llama la atención, porque también tienen una nueva administración.
Los Toros siguen detrás de Monterrey, pero no dejan de incrementar sus asistencias. En el Gasmart han pasado de 9 mil 391 a 11 mil 719 y hoy más que nunca la directiva está viendo cómo aterrizar su proyecto de un nuevo parque, ya que el entretenimiento que brindan y la respuesta de los fanáticos así lo están demandando.
Cabe señalar que este comparativo en promedio de asistencias es tomando en cuenta el actual de la temporada 2017 con el que finalizaron la edición pasada.
Lo ideal hubiese sido comparar abril de 2017 con 2016, sin embargo, este ejercicio sirve como parámetro para darnos una idea de que la afición al béisbol se mantiene firme pese a todas las turbulencias que se dieron previo al arranque de campaña.
GIL… Los Tomateros de Culiacán anunciaron hace días el regreso de Benjamín Gil como mánager para la temporada 2017-18 de la LMP, luego de enviarlo un año a la banca.
La directiva primero lo anunció mediante un boletín y en sus redes, ya que tenían encima a la prensa y temían que alguien filtrara la información a equis medio en exclusiva.
De entrada los Tomateros tendrán que hacer una operación cicatriz con el regreso de Gil, ya que si no lo contrataron el pasado invierno fue porque tenía varios roces con los peloteros y en la perspectiva de la oficina “ya no le jugaban”.
Gil es inteligente y eso no se discute. Es un tipo agresivo para la estrategia y así fue como llegó el campeonato para los Tomateros en la 2014-15, luego de 10 años de sequía.
Sin embargo, entre menos hable mucho mejor, porque él ya no es jugador sino un mánager que, por sobre todas las cosas, debe mantener en armonía a los 28 jugadores del roster y a su cuerpo técnico.
Un líder no es aquel que habla más fuerte ni el que siempre tiene la razón. Un líder es aquel que acepta sus errores y logra sacar el máximo rendimiento de cada uno sus pupilos, además de mantenerlos motivados.
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