Después de la tormenta llegó la calma a Veracruz y también para América. Lo que inició como un desastre, terminó por ser un importante triunfo 2-4 en el que las Águilas supieron aprovechar los crasos errores que dejaron con nueve Tiburones a Pablo Marini, hoy en severa crisis de resultados.

Veracruz se encontró con la primera oportunidad tras una trompicada serie de balones filtrados que terminaron en los pies de Adrián Luna para quitarse a Moisés Muñoz y definir a contrapié de Aguilar para irse al fondo. Luna se quitó la playera en el festejo y anticipó su expulsión.

El Tiburón acechaba y Muñoz le sacó el segundo a Pérez, pero no a Julio furch quien aprovechó otro rebote para ponerse frente al arquero y cruzarlo con un disparo que puso el 2-0.

En dos minutos la tormenta se apagó y América vio salir el sol en Veracruz, quien comenzó a protagonizar un tutorial de cómo regalar un partido tras ir ganando por dos goles.

Luna cometió una falta sobre Sambueza para ganarse la segunda amarilla y cuatro minutos después Pedro Gallese cometió un grosero error regalando la pelota en su área, Darwin centró y Silvio puso el 2-1 antes del medio tiempo.

El vendaval azulcrema inició el segundo tiempo y los errores jarochos no frenaron. Pablo Aguilar recentró una pelota, Silvio se quitó muy fácil a Cahais y definió para el 2-2.

Marini intentó reaccionar, mandó a Meneses a la cancha solo para “suicidarse”, pues el chileno se hizo expulsar por una doble plancha sobre el “Chepe” Guerrero cuando tenía ¡un minuto en la cancha!

Del otro lado sí funcionaron los cambios, pues Ambriz mandó al “perdonado” Renato Ibarra a la cancha y entró para definir el 3-2 y ya con un desfondado Veracruz, Darwin Quinteró marcó el cuarto tanto al 90′ con el que las Águilas volvieron a la calma tras la goleada sufrida con Tigres. (MEDIOTIEMPO)