Turismo Rural
El ambiente con olor a mar y bronceador, el sol bien puesto para broncear la piel sobre la cálida arena dorada están listos para protagonizar, junto con las familias, las mejores vacaciones de verano.
Mazatlán es espléndido en todos sentidos: paisajes naturales, vista al mar con tan solo recorrer su malecón, gente amable, y por si fuera poco, los mejores manjares marinos preparados por manos expertas que ponen en alto la tradición y sabor 100 por ciento sinaloenses.
Los 365 días del año la temperatura invita a sumergirse en la cálida bahía, pues la naturaleza privilegió a Mazatlán con una ubicación geográfica privilegiada, enclavándola en el Golfo de California por un lado y en la Sierra Madre Occidental por el otro.
La belleza natural de sus playas no es la única opción, pues aparte de sus 21 kilómetros de litoral, hay a su alrededor pueblos típicos con una gran riqueza cultural que se pueden visitar a través de un tour por la zona rural del puerto.
RECUADROS CON FOTO
El Recodo
Sindicatura ubicada a 45 kilómetros al noroeste de la ciudad. Para llegar a la cuna de Don Cruz Lizárraga, pionero de la música de banda y líder de La Banda El Recodo, se toma la carretera internacional con dirección al sur, para conducir hacia la desviación que está poco antes de llegar al poblado de Villa Unión.
Pregunte por la fruta de temporada, la comida preparada y los dulces, y recorran las calles que vieron crecer a los famosos músicos de la familia Lizárraga, sin faltar el Museo Casa de Don Cruz Lizárraga.
No es necesario que maneje. Todos los días salen de Mazatlán camiones que dan el servicio para los habitantes que quieren salir rumbo al puerto y viceversa.
El Quelite
Qué bonito es el quelite, bien haya quien lo formó…
Y sí. El pueblo de El Quelite, ubicado entre la Sierra Madre Occidental y Océano Pacífico, está a solo 38 kilómetros al noroeste de Mazatlán.
Si para llegar a esta pintoresca sindicatura va en auto propio, deberá tomar la carretera Internacional al Norte y en el kilómetro 33 tomar la desviación que lo llevará directamente a esta hospitalaria comunidad.
Este poblado conserva sus casas con fachadas altas y amplias estancias al exterior, donde el cultivo de plantas de ornato llena de colorido las calles todo el año.
Se recomienda que no coma antes de viajar, pues el olor de pan que se hornea de manera tradicional en horno de piedra y ladrillo a la usanza antigua, lo enamorará.
De las empanadas de calabaza nadie escapa, ni de los guisos caseros que los restaurantes locales ofrecen.
Durante el año se celebran festividades en las que los locales e invitados hacen gala de la charrería.
La Noria
La tierra del agave azul y el mezcal está al pie de la Sierra Madre Occidental a 35 kilómetros al noroeste de Mazatlán. Para llegar hay que dirigirse al poblado de El Habal, por la carretera México 15 a Culiacán, en donde se encuentra el entronque del camino que lo llevará directamente al pueblo.
En el camino los árboles de huanacaxtles y camichines le darán la bienvenida. La Noria toene 15 Comisarias: San Marcos, Juantillos, Puerta de San Marcos, Los Metates, Chicuras, El Zapote de la Noria, Veranos, Las Guásimas, Pichilingue, El Tecomate de la Noria, La Chapalota, El Placer, Las Tinajas, El Guamúchil y el Telcoyonqui.
En este lugar predomina la habilidad e imaginación de los artesanos que se lucen con la elaboración de sillas de montar y huaraches, entre otras sorpresas artesanales.
La rica cosecha Agave Azul y la producción de mezcal atrae a propios y extraños pues una marca ofrece un tour que incluye recorrido por los sembradíos de agave, explicación del cultivo y crecimiento de la planta de agave azul, demostración de Jima de agave, prueba de agave antes y después de la cocción, visita a los procesos antiguo y moderno de la elaboración del destilado de agave, degustación de jugo de agave y del producto blanco recién destilado.
En Mazatlán hay touroperadores que ofrecen paquetes que incluyen traslado.