CULIACÁN.- ¿Qué tanto están trabajando los 24 equipos de la LMB y LMP en cuestiones de mercadotecnia? ¿Qué tantos esfuerzos realizan en la imagen y promoción de su propio producto?

En una recopilación que realicé ayer, encontré datos muy interesantes sobre los clubes del béisbol mexicano que mejor manejan su mercadotecnia en las redes sociales.

Más allá de sus logros deportivos e historia, los cinco equipos más populares en Twitter son: Sultanes de Monterrey (67 mil 863 seguidores); Tomateros de Culiacán (44 mil 463); Naranjeros de Hermosillo (42 mil 093); Diablos Rojos del México (39 mil 873); y Yaquis de Cd. Obregón (35 mil 979).

La oficina de los Sultanes ha trabajado de forma extraordinaria su mercadotecnia porque en los últimos siete años no han ganado nada y tienen más de 20 mil followers (una barbaridad) que su más cercano, los Tomateros.

¿Cómo andan las cosas vía Facebook? aquí son los Naranjeros quienes encabezan las preferencias de los aficionados con 202 mil 676 like/seguidores. Luego aparecen los Sultanes (178 mil 036); sorprendentemente los Águilas de Mexicali (164 mil 025); Tomateros (161 mil 696); y Diablos Rojos (155 mil 177).

En el béisbol profesional nada es gratuito ni casual y ciertamente hay organizaciones que tienen la ventaja por sus logros deportivos, pero también se requiere trabajar muy fuerte y con pasión en esas áreas. Así vemos, por ejemplo, cómo los Toros de Tijuana ya suman cerca de 100 mil like en apenas un año desde que regresaron a la Liga Mexicana (93 mil 285).

En cambio, hay varios clubes que por ignorancia en el impacto de las redes sociales o en el peor de los casos, por ahorrarse unos centavos —no pagarle a especialistas en la materia—, tienen descuidado dicho departamento que ya es el mejor vínculo entre los equipos y sus fanáticos, contrario a los ilusos que siguen soñando con ver al béisbol mexicano en la televisión.

Valdría la pena que muchos directivos se hicieran una autocrítica y que verdaderamente le dieran la importancia al impacto del Internet que, de acuerdo con varios analistas, muy pronto llegará el día en que habrá WiFi gratis en todo México y ese tipo de rectas siempre hay que batearlas.

JCU… Tal vez por cortesía o por ingenuidad, Julio César Urías le dijo a Puro Béisbol que Mike Brito fue quien lo descubrió en el béisbol, cuando en realidad lo que hizo el scout cubano fue verlo en la vitrina que le pusieron los Diablos Rojos en la Academia de Oaxaca.

La palabra descubrir tiene un significado mucho más que eso. Fue, por ejemplo, lo que hizo el gran ex jonronero Jack Pierce con el zurdo Óliver Pérez, otrora un jovencito muy delgado de 15 años, a quien él vio en un try out que el propio norteamericano organizó por su cuenta en Culiacán.

Las historias de Pérez y Urías son muy distintas, salvo que son zurdos y egresados de la misma Liga Infantil Culiacán Recursos. Óliver nunca fue un “caballo” en las ligas pequeñas ni mucho menos en los torneos nacionales, donde el Chato Vázquez (de su misma edad) fue un monstruo que destacó en Panamericanos y Mundiales.

Así es que Jack Pierce tuvo la habilidad de ver algo en la bola de Pérez, sin ninguna otra credencial más que ser espigado, zurdo y con una buena recta a sus 15 años.

En cambio, Urías fue la gran estrella desde niño en su propia liga, luego en los distritales y en torneos nacionales juveniles.

Fue visto por varios scouts y hubo ofertas de equipos de Grandes Ligas directo a su padre Carlos Urías, mucho antes de que Mike Brito llegara con un mejor ofrecimiento de los Dodgers para cerrar el trato con los Diablos.

Y no tengo nada en contra de Mike Brito, pero eso no es “descubrir” a un pelotero.