El presidente Enrique Peña Nieto abandonó por segundo año consecutivo el festejo del 204 aniversario del Grito de la Independencia de México en Palacio Nacional, para atender la situación de emergencia que se registra en Baja California Sur por el huracán Odile.
“Nos aprestamos a emprender las acciones para la reconstrucción y para recuperar nuevamente la infraestructura afectada y apoyar a las familias que tuvieron pérdidas en sus hogares en su patrimonio”, expuso el mandatario federal.
Al término del grito de Independencia, Peña Nieto adelantó que acudirá a Baja California Sur para atender a los afectados por el huracán Odile.
Al igual que hace un año por las inundaciones y deslaves provocadas por los huracanes Ingrid y Manuel, el mandatario federal se disculpó por no permanecer en el festejo del 203 aniversario del Grito de Independencia de México.
En el patio central de Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo señaló que en Baja California Sur dejó daños en el patrimonio y en las instalaciones que dan servicio a la población.
“Esta circunstancia nos obliga como ya lo hemos venido haciendo desde la llamada de prevención y alerta para la preparación de este efecto de la naturaleza, y ahora para atender a la población damnificada y poder reconstruir lo que lamentablemente ocurriera en este estado hasta ahora más afectado y de mayores daños”, agregó.
Destacó que después del desfile militar y si las condiciones climatológicas lo permiten, “nos aprestamos hacer presencia en Baja California Sur, no obstante que hay funcionarios representando al gobierno de la República en los trabajos que se están realizando.
Tomado de Eje Central.
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