Para estar preparados a las nuevas y emergentes amenazas, incluyendo los que existen en el ciberespacio, y no poner en riesgo la capacidad de reacción de las Fuerzas Armadas, el secretario de la Defensa de Estados Unidos, Chuck Hagel compareció ante el Senado de su país para defender el presupuesto que los legisladores deben aprobar para el Pentágono.

El funcionario reiteró que forma parte de la propuesta reducir significativamente el tamaño del Ejército, en 13% durante los próximos cinco años, lo que sumaría unos 440 mil elementos, y la Infantería de Marina en 182 mil, además de reasignar a 900 infantes más para fortalecer la seguridad en las embajadas estadounidenses en todo el mundo.

Pero Hagel advirtió a los senadores durante la audiencia que, si el Congreso no proporciona  al Departamento el dinero que necesita “pondrá en peligro la buena disposición y la capacidad de nuestras Fuerzas Armadas y escatimaría la capacidad del país para responder con eficacia y decisión como los acontecimientos mundiales exigen”.

“Después de 13 años de largas operaciones estables, tenemos que cambiar nuestro enfoque hacia las necesidades futuras de cara a las nuevas y emergentes amenazas”, sostuvo Hagel al subcomité de defensa del Comité de Asignaciones del Senado.

Los recortes y ajustes que se prevén dentro del Pentágono, se harían en temas que no se consideran sustantivos para la capacitación de los efectivos y la modernización de equipo. El militar especificó que las enmiendas se harán en las compensaciones de los uniformados, no crecerán los salarios del personal y los subsidios para vivienda fuera de las bases se reducirán.

También se revisa el co-pagos para jubilados y sus familias, y el plan de salud de Tricare tendrá aumentos modestos, y sólo el servicio de salud para personal activo seguirá siendo gratuito.

“Las crisis recientes en Irak y Ucrania nos recuerdan lo rápido que pueden cambiar las cosas en el mundo y que ponen de relieve por qué tenemos que asegurar la disponibilidad, la agilidad y la capacidad de nuestras fuerzas armadas”, sentenció.  De acuerdo con el militar, se ha definido un monto por alrededor de los 75 mil millones de dólares para el próximo año y se requiere incrementarlo en 50 mil millones de dólares más, cada año, hasta 2021, para “mantener nuestra estructura de fuerza actual adecuadamente preparada y modernizada”.

“Tenemos que ser capaces de derrotar a las amenazas y los ataques cibernéticos terroristas y disuadir adversarios con armas cada vez más modernas y capacidades tecnológicas”, detalló Hagel.

La Marina, añadió, tendrá 11 grupos de ataque de portaaviones, además 11 embarcaciones más serán modernizadas y adaptadas a las nuevas tecnologías y demandas de servicio.

La Fuerza Aérea, continuó, sustituirá el avión U-2 por el avión Global Hawk, y dará de baja el avión de ataque A-10, por estar ya en declive para las operaciones.

”Bajo nuestro plan, el 100% de los ahorros derivados de la reforma de compensación se destinará a garantizar que nuestras tropas tengan la capacitación y las herramientas que necesitan para cumplir sus misiones”, explicó Hagel.