Francisco Benjamín Landgrave Buelna, señalado por la Fiscalía de Sinaloa de recibir dos pagos por la venta de colchones en mal estado, es un antiguo y conocido proveedor del gobierno de Sinaloa, del Comité Directivo Estatal del PRI y de la Universidad Autónoma de Sinaloa.
Luego de que la Fiscalía de Justicia dio a conocer su nombre en la audiencia inicial de Carlos Castro Olivas, ex coordinador administrativo de la Secretaría de Desarrollo Social y quien habría autorizado la compra, se detectó el nombre de Landgrave Buelna en varios padrones de proveedores de la administración pública.
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Los padrones, los destinatarios de recursos y los contratos en los que aparece Landgrave Buelna son públicos y se pueden consultar en las páginas web de transparencia de las instituciones señaladas.
El padrón más antiguo en el que aparece su nombre data de 2011 y es de la Secretaría de Salud, de la cual recibió varios pagos menores entre 2011 y 2013 por servicios de arrendamiento y gastos diversos en Congresos, Convenciones y Exposiciones.
Su nombre también aparece entre los proveedores del ISSSTESIN, dependencia que emitió un pago a su favor en 2012 por el concepto de diversos gastos de oficina.
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Landgrave Buelna también está registrado en el padrón del gobierno de Sinaloa, en la administración de Quirino Ordaz Coppel, pero en una búsqueda simple no se lograron encontrar órdenes de pago a su nombre.
Pero es en el PRI de Sinaloa, con el que Landgrave Buelna firmó una serie de contratos entre marzo y junio de 2016 por la prestación de servicios de asesoría, vigilancia y monitoreo a través de circuito cerrado.
En el portal de transparencia del PRI, el nombre de Landgrave Buelna aparece en la relación de destinatarios que recibieron recursos del partido político y junto a su nombre se da acceso a un expediente en el que se pueden observar los recibos de las transferencias bancarias y los siete contratos que el PRI firmó con el prestador de servicios.
En el padrón actual de la Universidad Autónoma de Sinaloa, Landgrave Buelna está registrado como proveedor de la máxima casa de estudios pero no se encontraron pagos realizados en años recientes.
Landgrave Buelna fue señalado por la Fiscalía de haber recibido de parte del funcionario de la SEDESOL, dos transferencias electrónicas, una por un millón 350 mil pesos y otra de 270 mil pesos, correspondientes a la venta de los colchones en mal estado que se repartieron en Culiacán, entre el domingo 14 y lunes 15 de octubre pasados.
Artículo publicado el 21 de octubre de 2018 en la edición 821 del semanario Ríodoce.
