Debido a las protestas, el presidente Donald Trump determinó que el programa de Acción Diferida para Arribos de la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), permanecerá vigente durante seis meses más.
“A todos aquellos (DACA) que están preocupados por su estatus durante el periodo de seis meses, no tienen nada de que preocuparse. No se tomarán acciones”, escribió el mandatario la mañana de este jueves en su cuenta personal de Twitter.
El martes de esta semana, mediante el Departamento de Justicia, Trump decretó el fin del DACA, instrumentado desde 2012 por una acción ejecutiva del entonces primer mandatario Barack Obama.
Al finiquitar el DACA, Trump dio al Congreso federal de su país una prórroga de seis meses para legislar y formular un proyecto de ley para resolver el estatus laboral y de residencia de unos 800 mil inmigrantes acogidos por la acción de Obama de hace cinco años, de acuerdo a Proceso.
Luego del anuncio, miles de afectados por la decisión presidencial salieron a manifestarse por las calles de varias ciudades de Estados Unidos. En Nueva York, una coalición de procuradores generales de 15 estados, más el Distrito de Columbiae, Washington, presentaron una demanda contra la orden del presidente ante la Corte Federal en Brooklyn.
La acción judicial de los procuradores estatales, respaldada por organizaciones civiles y empresarios, pretende detener la instrumentación de la decisión de Trump que entraría en vigor el 5 de marzo de 2018.
En el plazo de seis meses el Congreso federal estadounidense tendría que estructurar un proyecto de ley que defina la situación laboral y de residencia temporal que otorga el DACA a los llamados “dreamers” o soñadores.
Bajo el DACA los soñadores tienen un permiso de trabajo y de residencia por dos años, pero ahora con la orden de Trump se anularía el 5 de marzo de 2018, si el Congreso federal fracasa en resolver el caso por medio de una legislación en materia migratoria.
La orden de Trump establece que, hasta el próximo 5 de octubre, y bajo el criterio de revisión caso por caso, se aceptarán solicitudes de renovación por parte de los soñadores sobre su estatus de residencia y laboral. Las peticiones nuevas de ingreso al DACA, ya no son aceptadas por el Departamento de Seguridad Interior.
El decreto de Trump permite a todos aquellos beneficiados por el DACA, renovar por otro plazo de dos años sus permisos temporales de empleo y residencia. En ese contexto, quienes pueden enviar sus peticiones de renovación son los soñadores cuyos permisos tengan vencimiento a partir del 5 de septiembre de este año y hasta el 4 de marzo de 2018.
A quienes se les vence la licencia temporal de empleo y residencia el 5 de marzo de 2018 y en fechas posteriores, en automático se les terminan los beneficios obtenidos bajo el DACA y técnicamente quedarán bajo amenaza y posibilidad de ser deportados a sus países de origen.
A los que se les renueven los permisos antes del 5 octubre de este año, después de una revisión minuciosa caso por caso, podrán quedarse a vivir y trabajar por el resto del tiempopo vigente de la licencia, después del 5 marzo de 2018, en caso de que el Capitolio no logre antes resolver la situación por medio de una legislación.
Legisladores demócratas y republicanos ya han anunciado labores sobre diferentes proyectos de ley para resolver el problema legal al que estarían sujetos los soñadores el próximo año.
Varias de las legislaciones que se han anunciado consideran la posibilidad de darle residencia permanente a los soñadores, bajo ciertas condiciones muy parecidas a las que se requieren para obtener la residencia permanente en Estados Unidos.
Con estos escenarios y posibilidades, en los pasillos del Congreso se habla de que la mejor solución sería darles la residencia permanente a los soñadores, para que después de un plazo de cinco años, los que no tengan antecedentes penales puedan solicitar por naturalización la ciudadanía estadounidense.
