Trabajadores de penales estatales esperan desde hace cuatro años bases sindicales, nivelaciones y compensación por alto riesgo
“¿Cómo se sienten para resistir con este plantón laboral, hasta que el Gobierno del Estado les dé una respuesta definitiva?”, preguntó Ríodoce a los trabajadores del penal de Mazatlán que amenazaban con mantenerse en un paro laboral ininterrumpido.
Los inconformes responden casi al unísono: este paro se hizo porque tuvieron una reunión, y todo mundo está inconforme, ya no quieren esperar más tiempo para recibir un beneficio. Todo están unidos y van a seguir aquí, no saben hasta qué horas. Hasta que Gobierno les dé una respuesta. Ya no van a estar esperando nada, si quieren alguna negociación, la pueden hacer, pero con respuesta inmediata. Ya estuvieron mucho tiempo tocando puertas, ellos saben perfectamente de este movimiento y de lo que están pidiendo los trabajadores del Cecjude Mazatlán, que es un movimiento pacífico, pero quieren respuesta ya.
Desde la las 8:00 horas del jueves 31 de marzo, los trabajadores vestidos en rojo y negro, armados de pancartas, se apostaron en las afueras del centro penitenciario, para informar que se había agotado el diálogo con los secretarios de Seguridad Pública y de Gobierno del Estado, pero que ambos no han dado respuestas concretas a sus peticiones.
“Estamos cansados, no podemos decir nada de las autoridades en contra, porque todos nos han atendido muy bien, pero nadie nos ha dado una respuesta definitiva, es lo que estamos pidiendo ya, que se concrete y se defina esto”, exigió uno de los trabajadores del penal de Mazatlán.
Los afectados aclararon que “dependemos de la Secretaría de Seguridad Pública, ellos ya están enterados de todo eso, tenemos los oficios recibidos de parte de ellos; se habló con el señor gobernador también él conoce la situación, lo que queremos es que alguna autoridad salga y diga dónde está el recurso, si lo tiene seguridad pública, diga el motivo del por qué no nos llega”.
“Estamos hablando de 114 trabajadores, porque aquí hay muchos médicos, hay profesionistas, tenemos trabajadoras sociales, sicólogas, que no se les da ese beneficio”, aseguró uno de los manifestantes.
“Nosotros ya tocamos puertas a todas las instituciones de Gobierno, ya estuvimos en reuniones con Genaro García Castro y Gerardo Vargas Landeros (secretarios de Seguridad Pública y General de Gobierno), incluso nos atendió el gobernador, y la verdad pues creemos que ya pasó el tiempo suficiente y no hemos recibido ninguna respuesta”, enfatizaron.
Los trabajadores sindicalizados dejaron claro que su inconformidad organizada en los penales de Mazatlán, Culiacán y Los Mochis es para que las autoridades aludidas se dignen en mirar hacia los centros penitenciarios de Sinaloa.
“Nosotros no nos vamos a mover de aquí, no vamos a entrar a trabajar hasta que Gobierno del estado nos dé una respuesta, el por qué no se nos ha ayudado a los centros penitenciarios en ninguno de los aspectos”, advirtieron.
Los empleados inconformes le están pidiendo al “patrón” que haga efectivos los beneficios laborales acordados con el sindicato, porque desde hace tres o cuatro años no los han recibido, ni saben qué pasa con el dinero acumulado.
“Creemos en las autoridades estatales, creemos en Vargas Landeros, porque tuvimos una reunión con él y con Genaro García, pero aquí estamos y queremos que se vea la respuesta concreta a nuestras peticiones”, insisten.
—¿El temor de ustedes es que este Gobierno ya va de salida?
—Así es, y no nos han resuelto nada hasta ahorita.
Juego del “gato y el ratón”
Siete horas duró el paro laboral, pues trascendió que Armando Heráldez Machado, dirigente del Sindicato de Trabajadores al Servicio del Estado (STASE), había hablado con el gobernador Mario López y que éste habría prometido que les daría bases a los trabajadores.
Según los inconformes, Heráldez Machado mantiene un juego de poder con el ejecutivo estatal, en la lógica de que si los trabajadores de los penales del estado ya habían esperado cuatro años y medio el dinero de los “beneficios laborales”, podrían esperarse los otros diez meses que le falta a esta administración para irse.
31 de marzo a las 8:30 horas. “Estamos en un paro laboral del área administrativa, porque tenemos cuatro años y medio pidiendo un beneficio para que nos lleguen profesionalizaciones, nivelaciones, alto riesgo y bases sindicales”, manifestó uno de los empleados que coordinaron su inconformidad con sus colegas de Los Mochis y Culiacán.
31 de marzo a las 15:30 horas. Habla Armando Heráldez Machado con el ejecutivo estatal y lo único que le asegura es que a los trabajadores que les faltaban base se las van a dar. Lo de la profesionalización y nivelación quedó pendiente, porque se trataba de soltar dinero, y hay que esperar hasta el miércoles 6 de abril, “que estaban viendo cómo le hacían”. En caso de que no cumpla el Gobierno del Estado, los trabajadores se irán de nuevo a paro, pero ya hasta las últimas consecuencias. Pero la pregunta sigue: ¿dónde quedó el dinero?
