La estrella mexicana vive junto a su padre la experiencia de jugar en su país

Sergio Romo disfruta de sus días en el beisbol mexicano al lado de su padre Francisco Romo.

El cerrador mexicano de las Grandes Ligas está por tercer año al hilo jugando en México con los Charros de Jalisco, esta vez puede disfrutar de la compañía de su padre, años anteriores por cuestiones de trabajo no lo había podido acompañar en esta gran aventura.

Francisco Romo, quien es nativo de Aguascalientes, se crió en California junto a su padre, cuya familia es tapatía, razón por la cual Sergio decidió jugar con los Charros.

“Me da mucho gusto poder compartir estas experiencias con mi dad, él también tenía los deseos, sueños de jugar profesional, no le tocó pero a mí sí gracias a Dios y yo puedo darle esas experiencias”, comentó Sergio Romo, ganador de tres anillos de Serie Mundial.

“Mi apellido Romo viene de Jalostotilán, para mí regresar a mi tierra con mi gente, de donde viene mi sangre, por eso me da mucho orgullo jugar frente a mi familia”.

El padre de Sergio ha sido un entusiasta deportista en Mexicali, donde el Mechón comenzó como jugador de beisbol, fue ahí donde llegaron a coincidir jugando juntos, además de su hermano Andrew Romo, quien ahora es bombero en Brawley.

La última vez que Sergio convivió con su familia tenía tres años, razón por la cual le llena de gusto estar jugando en México, su padre le acompaña en cada juego, ya sea de local o visitante.

Carrillo jugará con el Licey 

Los Tigres del Licey de la Liga de República Dominicana contratan al catcher mexicano Xorge Carrillo, procedente de las Águilas de Mexicali en el beisbol de su país.

El catcher nativo de Tijuana y ex prospecto de los Mets de Nueva York, se suma a la escuadra liceista junto a sus compatriotas David Reyes y Javier Solano, ambos lanzadores derechos, quienes están listos para jugar en el round robin de la LIDOM.

Este invierno con los Águilas, el receptor conectó para .286 con dos jonrones y 13 carreras producidas en 54 encuentros.

Artículo publicado el 6 de enero de 2019 en la edición 832 del semanario Ríodoce.