COVID-19, el virus con el que los cruceristas deberán aprender a navegar
El brote de casos de COVID-19 a bordo de cruceros turísticos es algo con lo que las navieras y pasajeros van a tener que vivir de manera indefinida, y solo resta cuidar que los protocolos se cumplan para evitar que la actividad recién retomada, vuelva a colapsar y a generar pérdidas millonarias.
La noticia de que el crucero Norwegian Cruise Line fue reportado con 10 personas a bordo que dieron positivo al COVID-19 empezó a circular desde el 4 de diciembre llamando la atención de los sectores que dependen de esta actividad en el país.
Fueron más de 3 mil personas a bordo del barco que partió de Nueva Orleans el 28 de noviembre e hicieron escala en Belice, Honduras y México, y de las que el Departamento de Salud de Luisiana informó que algunos de ellos se encontraban en cuarentena.
El 7 de diciembre la Secretaría de Turismo de Quintana Roo aseguró que ninguno de los 17 turistas —ya no 10— contagiados que hizo escala en el puerto de Cozumel, pisó tierra en la entidad, descartando una cadena de contagios.
No es el primer caso
Arturo Musi Ganem, presidente de la Asociación Mexicana de Cruceros, informó que ese no es el primer caso que se presenta, y que es algo con lo que la actividad tendrá que aprender a convivir como en su momento lo hizo con la influenza.
La diferencia en el caso de Cozumel, es que se dio más difusión al hecho, pero son casos que ya se habían presentado en todo el mundo desde que se reactivaron los viajes, dijo, y México no ha sido la excepción.
Ahora hay más información que antes y ya la gente está vacunada, mencionó, y los casos que se han presentado no han requerido que los pasajeros sean internados en algún hospital del destino turístico al que llegan porque no lo amerita.
El procedimiento es que la tripulación los aísla y le da atención médica a bordo, pero también están preparados con una logística para que en caso de ser necesario, el paciente sea internado y aislado en tierra.
Subrayó que las medidas internacionales son muy estrictas pues para permitir que un viajero aborde el barco debe presentar certificados de vacunación y pasar las pruebas de salud que se le apliquen.
Asimismo, agregó, “recordemos que las navieras han invertido en mejorar sus instalaciones para purificar el aire y contar con atención médica a bordo”.
Los cruceristas pasan por otros filtros al llegar a los puertos, explicó, y de ahí son trasladados a los recorridos de los destinos turísticos.
Musi Ganem consideró que es en las ciudades donde se podría correr el riesgo de contagio y no a bordo del barco.
Este invierno el regreso de las navieras a puertos mexicanos se ha dado de manera importante, dijo; Mazatlán, Los Cabos y Puerto Vallarta tienen itinerarios para que sea un buen cierre de año.
De acuerdo con la Administración Portuaria Integral (API), Mazatlán tiene programados los arribos de las líneas Princess Cruise Lines, Carnival Cruise Lines, Norwegian Cruise Line, Halland America Line, Royal Caribbean Cruice Line y el Regent Seven Seas Mariner, que en conjunto sumarían 28 llegadas al puerto durante el mes de diciembre; sin embargo están sujetas a cambios.
Hasta el viernes 10 de diciembre ya habían llegado al puerto 10 cruceros con 15 mil 657 pasajeros y 10 mil 673 tripulantes, y la programación confirmada hasta el 21 de diciembre sumaba el arribo de15 navíos, por lo que los 13 restantes publicados en el programa de la API, y que abarca hasta el 31 de diciembre, están por ser confirmados por las compañías navieras.
Sin bajar la guardia: Sectur
El caso de Cozumel no pasó desapercibido en Sinaloa, y María del Rosario Torres Noriega, secretaria de Turismo estatal, dijo que “la guardia no la podemos bajar por ningún motivo, sí supimos obviamente de esa noticia, y lo hemos platicado con la Secretaría de Salud y el Sistema Portuario Nacional, que es aquí donde ellos reciben los cruceros”.
Personalmente, dijo, ha revisado el tema con el Contralmirante, Mariel Aquileo Ancona Infazón, “los protocolos están ahí, siempre ha estado, no bajamos la guardia, y cuando salen este tipo de situaciones siempre es estar revisando que se estén llevando a cabo las revisiones y protocolos ya instalados”.
“Chequeo de temperatura, uso de gel y cubrebocas, y el propio crucero les pide certificado de vacunación, y a quien presente síntomas no se les permite bajar, explicó.
Aseguró que hasta el momento en Mazatlán no se ha presentado ninguna situación que pudiera afectar la actividad.
“No veo (la posibilidad de riesgo en la ciudad) porque el tour que hacen es un grupo de personas y ellos ya cumplen con las medidas de salud y están vacunados, difícilmente se podrían contagiar”, consideró.
Torres Noriega aseguró que ha platicado respecto a los protocolos con el secretario de Salud, Héctor Melesio Cuen Ojeda, y ya le notificó que se instalará el Comité Estatal de Salud para estar viendo todo este tipo de situaciones que se presentan.
Aunque el puerto de Mazatlán es el que mayor actividad naviera tiene, dijo que Topolobampo se atenderá al mismo nivel, ya que el 29 de diciembre llegará el primer crucero turístico desde que se cancelaron los arribos por la pandemia, con 2 mil visitantes entre pasajeros y tripulantes.
Artículo publicado el 12 de diciembre de 2021 en la edición 985 del semanario Ríodoce.
