Los Chapitos piden a las autoridades que no actúen “por simple creencia o sospecha”

Los hijos de Joaquín el Chapo Guzmán niegan haber cometido la emboscada que dejó cinco soldados muertos y 10 heridos, mientras el Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, asegura que fue el Cártel de Sinaloa.

En una carta pública, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo se deslindaron de la agresión cometida el viernes 30 de septiembre contra personal militar para rescatar a Julio Óscar Ortiz Vega, alias el Kevin.

El día del ataque, el comandante de la Tercera Región Militar, Alfonso Duarte Mújica, dijo que los responsables podrían ser los hijos de Guzmán Loera.

“Hasta el momento no tenemos la certeza de estos grupos, pero es muy probable que sean de los hijos del Chapo”, señaló horas después de la emboscada.

En la carta firmada por los hermanos Guzmán Salazar, fechada el 2 de octubre y hecha pública el viernes 14, los hijos del capo niegan su participación y piden una investigación científica para que se haga justicia a las víctimas.

“Nos deslindamos de la masacre ocurrida hacia personal militar el 30 de septiembre de este año en Culiacán, Sinaloa y rechazamos tajantemente haber participado u ordenado el ataque, con la aparente finalidad de rescatar a persona que ni conocemos, ni nos une lazo de sangre (en su momento no lo hicimos con nuestro padre, menos arriesgaríamos nuestra integridad y tranquilidad por una tercera persona), desconociendo el por qué Autoridades Militares nos involucran, proporcionando información errónea a los medios de comunicación en la cual hacen señalamiento directo en nuestra contra”, señalan los hermanos Guzmán.

En el documento, mencionan que el Ejército cuenta con información privilegiada y equipo de espionaje que de haberlos utilizado tendrían la seguridad de que ellos son inocentes.

Los hijos del Chapo pidieron que se haga uso del equipo de inteligencia para dar con el paradero de los verdaderos responsables y se haga justicia a las víctimas.

También llaman a las autoridades a que no actúen con creencias o sospechas sin base alguna en su contra y hagan una investigación científica que determine la realidad.

“No hemos peleado contra el Gobierno ni queremos hacerlo. Eso sería prácticamente cavar nuestra propia tumba. Sabemos en carne propia la aplicación del alto nivel de inteligencia que puede ser ejercido por el Estado Mexicano, a través de las Fuerzas Armadas, ya que sin el uso de esta inteligencia no hubiera sido posible la detención de nuestro padre”, aseguran Iván y Alfredo.

El mismo día que se hizo pública la carta, el Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, dijo que las investigaciones sobre la emboscada siguen en curso y la principal línea de investigación apunta al Cártel de Sinaloa.

“Tiene que ver con ese grupo, no específicamente con los hijos, sino con ese grupo, tiene que ver con diversos actores”, mencionó.

Añadió que también se investiga la posible participación de autoridades locales.