Estoy dentro del PAN, pero no con la dirigencia: Rafael Morgan

 

RAFAEL MORGAN. Fundamentalismo panista.

 

—Primero quiero que me digas si dejaste el PAN…

—No, sigo siendo militante del PAN.

 

—¿Cómo se plantea esta cuestión un viejo militante panista? Margarita (Zavala) se sale del PAN y decide buscar la candidatura independiente, y junto con Margarita se salen un montón de panistas pero hay militantes del PAN que la siguen sin salirse del partido ¿cómo es tu caso? ¿cómo navegas con esta contradicción?

 

Rafael Morgan Ríos es un fundamentalista de la política. Se basa en sus principios y si éstos se aplican dentro o fuera del partido en el que ha militado casi seis décadas, no importa. Eso significa que es radical. Va por lo que cree y nadie puede reclamarle nada si lo ve detrás de ese modesto escritorio por la calle Rafael Buelna, asistido por dos jóvenes en su tarea de organizar la recolección de firmas en favor de la candidatura independiente de la esposa de Felipe Calderón. Nunca se hizo rico y fue, durante el sexenio anterior, subsecretario de la Función Pública.

 

—El estatuto del partido dice claramente que puedes ser inclusive acreedor a expulsión aquel que apoye a un candidato de un partido contrario, pero un ciudadano no es un partido, y además ahorita no es candidato todavía.

Estamos apoyando a un ciudadano para que consiga las firmas. Cuando fue Manuel Clouthier candidato a diputado y que juntó firmas, muchos panistas dieron su firma y hubo quien lo apoyó en la búsqueda de las firmas y no pasó nada, por lo mismo.

Entonces hasta ahorita estamos apoyando a un ciudadano a que consiga firmas para que sea candidato.

—Esa es la parte legal, pero háblame de la parte moral, tú eres panista de cepa, se supone que va a haber un candidato panista a la presidencia  y tú estarías apoyando a una candidata que no será de tu partido…

—Yo soy partidario del PAN desde 1961, tengo 56 años dentro del partido, soy de los más viejos del partido. Pero ¿por qué entra uno a un partido político?, habrá quien entra por amistad, habrá quien lo hace para entrar en la política, otros, evidentemente, por conveniencia: pero yo entré por principios.

 

— ¿Ha cambiado el partido?

— Hay que hacer una aclaración que es muy pertinente: una cosa es el partido y otra cosa la dirigencia. Los dirigentes ahora están muy enfocados en sus intereses personales. Y habrá otros, más buenos o menos buenos, pero yo en este momento estoy dentro del PAN, más no con la dirigencia ni nacional ni local.

 

—¿Qué pasó en el PAN? ¿qué está pasando?

—Lo que yo estoy viendo en el partido es que se olvidaron de la capacitación y de la formación de nuestros militantes y de formar a los ciudadanos como panistas; nadie nace panista, ni nadie nace ciudadano, hay que hacerlo desde la escuela, hay que ir haciendo  a los ciudadanos y luego de ahí hay que hacer panistas y después hay que ser líderes, y después hay que ser gobernantes: todo eso se olvidó en el partido.

 

—Y esto ocurre, supongo, a partir de que el PAN llega al poder presidencial…

—No, el PAN estaba llegando al poder desde antes, pero cuando llegaron a la presidencia de la República, empezaron a verse esos problemas, porque mucha gente vio que era posible acceder al PAN, acceder al poder y gozar de las mieles del poder. Pero no es responsabilidad de ellos, ni de los ciudadanos, es del partido, porque la organización, la institución debió haber previsto y debió haber trabajado en este menester de educar a los nuevos panistas como panistas.

 

—Esto ha ocurrido a nivel nacional, pero también en el estado, por ejemplo hace seis años cuando se aliaron con el PRD, PT con un candidato que era de esencia priista.

 

—Otra vez el ansia de poder. Ahora los que entran al partido, entran ya para entrar al poder, no entran a trabajar para entrar al poder. Pero además, ahora que entraron al poder, ¿qué están haciendo?, no están ejerciendo el poder como es debido, y sobre todo aquí a los niveles locales y municipales.

“La única diferencia que yo tuve con Felipe Calderón, cuando era subsecretario, fue precisamente porque él insistía en que fuera Malova el candidato, porque finalmente era el que de acuerdo con las encuestas, daba posibilidades de triunfo, aunque fuera en alianza.

“Yo me peleé con Felipe, duro, por teléfono. Y Calderón decía ‘vamos a apoyar a un tipo de Mochis’, y llegó el momento en que Felipe ya no tuvo argumentos y me dijo ‘pues a ver como arreglan ustedes ahí en Sinaloa esta chingadera’ y ¡pas!, me colgó. Y ya no tuvo argumentos, porque estamos apoyando a alguien en contra de los principios del partido.
“Ahora sabemos que fue un fracaso la alianza, fue un fracaso el candidato, fue un fracaso el gobernador y fue un fracaso de la dirigencia que lo recibió”.

 

—El PAN a pesar de todo lo que me estás diciendo, es un partido ahora muy rentable, se ha reposicionado con el electorado, lo vimos en 2015, 2016… es un partido muy competitivo.

—Sí, pero yo creo que hay que meter todo a la balanza. Por ejemplo en estos momentos el PAN está perdiendo la oportunidad de oro, porque dado el desprestigio de los gobernantes del PRI en varios estados y la sensación de violencia y una economía que va trastabillando, el PAN se dividió internamente por la visión personal del dirigente principal. La responsabilidad número uno de (Ricardo) Anaya es tener cohesionado al partido y lo que hizo fue dividirlo, fragmentarlo. El PAN gana por la torpeza y los malos gobiernos de los contrarios, priistas o perredistas y ahorita también hay muy malos gobernantes a nivel federal, pero a como están las cosas no parece que el partido vaya a aprovecharlo.

 

—¿Qué va a pasar contigo cuando Margarita consiga las firmas y sea candidata y vaya en contra del Frente Ciudadano y contra el PAN?

—El tema es que este Frente del PAN, con el PRD y con MC, hasta cierto punto exime a los panistas de seguir al PAN, porque ya amarró el PAN con el PRD, que es antagónico desde el punto de vista ideológico.

 

—Dime posibles escenarios de 2018; tenemos a Margarita como candidata y el Frente tiene su candidato, puede ser panista, en este caso Ricardo Anaya, puede ser perredista, en este caso con Mancera; el PRI, tiene su candidato, Morena tiene el suyo, igual el Bronco puede ser…

 

—Antes de esas posibilidades déjame decirte una cosa, para mí no es lo mismo desde el punto de vista panista, que el candidato sea Ricardo Anaya, un panista o inclusive Moreno Valle, que salió del PRI, a que sea Mancera, y obviamente no apoyaría a un personaje del PRD a la presidencia de la República, de ninguna manera lo apoyaría.  Pero si es Anaya, hay que apoyar por cierto problema de conciencia, porque es del PAN, como candidato del PAN por el Frente, ahí sí habría más problemas. Sin embargo, de nueva cuenta pongo en la balanza los principios de Margarita porque son los principios del PAN; los de Anaya no lo sé, entonces mi decisión es por los principios.

 

—¿Qué crees que ocurra, cuál es tu análisis de a dónde se vaya el voto, a quién le va a quitar votos Margarita, a quien le va a quitar votos el Bronco, el voto duro de Morena, el del PAN?

—Yo creo que al Bronco le quitará unos cuantos votos en general a todos, pero no muchos. Margarita sigue apareciendo con 16, 18 puntos, hay algunas encuestas que le dan el 22, creo que le va a sacar muchos votos al PAN, pero si el candidato es Mancera le va a quitar muchos más votos al PAN, y si es Anaya pues le va a quitar menos.

 

—Pero ante una fragmentación de cinco candidatos, PRI, Morena, Frente, Margarita y el Bronco, ¿a quién beneficia esa fragmentación?

—A Morena, pero en las campañas pasan mil cosas…

 

—Estuve observando a (José Antonio) Meade y me parece una reproducción de la campaña pasada de Quirino, sin carisma, sin discurso, sin conexión con los electores…

—Quirino sin ser un buen candidato tenía toda la estructura, porque eso es cierto, el PRI sigue teniendo una estructura bien organizada, ellos sí llenan todas las casillas, tienen representantes y en los ranchos siguen controlando mucha gente, hasta para controlar las casillas. Meade va a depender mucho (su posicionamiento) de que tenga un buen equipo que mande mensajes diferentes a los tradicionales del PRI.

 

—¿Le ves futuro al país?

—Somos más los buenos que los malos para empezar, no hay que olvidar eso.

 

—Y en materia de corrupción, de transparencia, sigue habiendo mucha corrupción.

—Claro, y mira es lo que le decía a Felipe, lo bueno no sale. Casi 50 mil castigos aplicamos nosotros en la SFP, de los cuales como unos 10 mil eran de sanciones económicas o penales o de instituciones, de esas 10 mil, como 2 mil eran penales.

Yo creo que el país sí tiene salida, se ocupan liderazgos, por eso Margarita puede ser una buena opción.

 

—¿López Obrador?… es su tema.

—López Obrador quien sabe, porque tiene criterios muy del pasado.

Entrevista publicada el 10 de diciembre de 2017 en la edición 776 del semanario Ríodoce.

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