La pintura luce carcomida. El logotipo del Partido Acción Nacional en la barda de la sede estatal puede ser casual y no tener nada que ver con la crisis al interior del partido. Sin embargo, la mañana del martes 4 de septiembre, un par de mantas amanecieron colgadas en el sitio.

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Las mantas firmadas por un movimiento denominado “Panistas al 100 con Mazatlán” y la otra “Panistas al 100 con Sinaloa”, corresponden a un grupo liderado por Tarcisio Silva Lozano, militante de la vieja guardia panista.

“Exigimos que el presidente del C.D.E. cumpla con los estatutos y reglamentos. Que se haga una auditoría, convoque al consejo estatal, que se nombre a la comisión electoral, la convocatoria para la elección del nuevo C.D.E.”, se lee en una de ellas.

Al respecto, el actual presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), Sebastián Zamudio Guzmán, explicó que dicho grupo está desinformado respecto a la situación actual del PAN.

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“En primera en cuanto a las finanzas, recibimos unas finanzas destrozadas aquí en el PAN hace un año y medio que entramos por una deuda de casi 9 millones de pesos, y estamos por cerrar el año con deuda de 300 mil o 500 mil pesos”, dijo Zamudio Guzmán.

“La auditoría ciertamente es sana y por eso ya está  aquí un auditor que tiene un mes (trabajando) y la vamos a dar a conocer en su momento a los órganos del PAN”, añadió.

La respuesta no fue satisfactoria para Tarcisio Silva y el grupo de panistas de Mazatlán. El tema del presupuesto es tan sólo uno de varios que causan ruido en la sede estatal del blanquiazul.

“Seguramente te enteraste que el día 4 de este mes sostuvimos un grupo de panistas mazatlecos un plantón permanente para exigirle al presidente del CDE que convocara a un consejo ya que no había presentado el presupuesto que ya estaba ejerciendo este año 2018, entre otros puntos”, señala.

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“Y solamente uno no me atienden, que es el de instalar la comisión electoral para iniciar el proceso de renovación del Comité Directivo Estatal”, añade.

La situación es descrita como apartada de la ilegalidad.

Pasado, presente y futuro

De la vieja guardia de Acción Nacional, Tarcisio Silva entiende que el futuro del PAN dependerá mucho de la renovación tanto de la Dirigencia Nacional como de la Estatal. El presente, dice, está perdido, hubo un retroceso, pero el futuro puede ser salvable.

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“Dependerá de dos cambios que vienen muy importantes: la renovación del CDE, el estatuto establece que el segundo semestre del año de la elección debe de convocarse para elegir un nuevo Comité, y como tú bien sabes, ya andan prácticamente en campaña los aspirantes a dirigir al partido a nivel nacional, entonces el futuro dependerá de quiénes queden en la Dirigencia Nacional y quiénes queden en el Directivo Estatal para rescatar al partido de la situación que vivimos”.

Silva Lozano se remonta a 1980. Ese año, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se erigía como primera fuerza en el Estado, aplastando al PAN.

“Una votación que tuvimos desde 1980, 38 años, fíjate nomás, el 10.96 por ciento que fue la votación que nos reconoció el (ahora) Instituto Electoral”, dijo.

En los años posteriores Acción Nacional se comprendería como una real segunda fuerza electoral, con porcentajes en ascenso desde 1986 hasta obtener una victoria en 2010 con la ya conocida historia de Mario López Valdez.

Sin embargo, para Silva Lozano la era actual blanquiazul es más oscura que la de entonces.

“Tuvimos un total retroceso y bueno, dependerá de la nueva dirigencia que en su momento se elija, el trabajo que haga para rescatar al partido”, añade.

Las voces de la vieja guardia no son las únicas que suman opiniones de crisis al interior del partido. La pasada elección polarizó las opiniones al interior del PAN, y hoy día, algunos sectores, entre fuga a otros partidos y desafiliaciones, ven al blanco y azul carcomerse.

Para Miguel Ángel Díaz, actual regidor del Cabildo de Culiacán, la situación es de simulación. El ejemplo lo explica con lo ocurrido en la pasada elección, donde su ex partido, el PAN, fue en alianza con PRD y Movimiento Ciudadano y además, con el Partido Sinaloense (PAS).

Recientemente, tanto Díaz como otro grupo de panistas fue acusado por los Consejos Municipal y Estatal de dar la espalda al partido, acusado de brindar apoyo a otros candidatos y por ello, enfrentar una situación de expulsión del blanquiazul.

“Yo no tuve la oportunidad de apoyar a ningún panista más que a Ricardo Anaya, porque pues esa fue una decisión del partido en ir en alianza. Entonces no es un argumento válido que se me pidió la renuncia cuando yo la pedí de forma personal y particular”, explicó.

“Y yo creo que esto se suma al ejercicio de simulación que tiene el partido, y cuando te digo simulación yo te digo que simulamos todos los que estuvimos en su momento en el PAN, también soy culpable de formar parte de esa simulación o de creer que se están haciendo las cosas distintas”, añadió.

Junto a Miguel Díaz, Roberto Cruz Castro enfrenta situación similar. Asimismo, otros 12 panistas presentaron su renuncia al partido ante el Comité Directivo Municipal, que dirige Adolfo Beltrán Corrales, quien confirmó el proceso.

“La diferencia es que tenemos que aprender a que la solución no está en las vías plurinominales. Si Acción Nacional quiere algún día llegar a ser un poco de lo que fue antes, que yo en mi particular punto de vista, yo creo que es un partido que está en etapa terminal”, concluye Díaz.

Y mientras viene el gobierno de transición a nivel federal y el cambio en el Congreso Local, la situación actual del PAN los coloca como tercera fuerza electoral. La hipótesis de Tarcisio Silva, basada en ser oposición o segunda fuerza, se sostiene: hay retroceso y ahora son el tres.

Artículo publicado el 23 de septiembre de 2018 en la edición 817 del semanario Ríodoce.