Horas después de enterarse que fue llamado como reemplazo del fracturado Oribe Peralta para Juegos Olímpicos, Carlos Fierro viajó este lunes por la mañana con una mezcla de sentimientos, acompañado por Raúl López, quien sustituirá al también lesionado Rodolfo Pizarro.

Ambos fueron convocados apenas este domingo ante las bajas que dejó el partido contra Fiji en la segunda jornada para el Tri en la justa deportiva, y arribarán este lunes por la noche a Brasilia, sede del decisivo juego frente a Corea el miércoles.

“Voy con toda la ilusión, como si hubiera estado desde el principio, tengo que llegar conectado, porque nada más hay un partido y tenemos que ganarlo para pasar a la siguiente ronda”, expresó Fierro.

“Es la (oportunidad) más importante que se me ha presentado, creo que también la más difícil pero también la más hermosa que voy a vivir”.

El campeón del mundo Sub-17 en 2011 comentó que esa experiencia fue grandiosa, pero consideró que olímpicos será algo distinto.

Se dijo motivado por el llamado, aunque triste por las circunstancias.

“Queremos hacer valer el trabajo de ellos, lo que hicieron estos dos partidos para poder traer el oro a casa por ellos”, agregó.

Fierro fue avisado este domingo por la noche por el director deportivo de Gallos, Joaquín Beltrán, y el viaje debió ser vía Panamá.

“No me lo esperaba, la verdad, se me puso la piel chinita cuando me dijeron, me emocioné totalmente, estoy muy feliz y ya con las ansias de llegar con mis compañeros”, expresó.

Sin embargo, aclaró que tendrán el martes para descansar, por lo que no habrá pretextos de cansancio para enfrentar a Corea.

“He tenido un proceso largo, conozco a todos los compañeros, sé cómo trabaja el profe, lo que le gusta”, añadió.

Fuente: Redacción