“Había desarrollado una teoría sobre lo que era ser un buen policía en China en aquella época. Dependía de decir con eficacia lo que se podía y lo que no se podía hacer. Y era así porque había muchos casos en los que no valía la pena esforzarse demasiado, ya que la conclusión estaba predeterminada por las autoridades del partido.”

Qiu Xiaolong

El 27 de agosto pasado, el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, planteó ante integrantes del PRI en la Cámara de Diputados la posibilidad de crear una fiscalía anticorrupción que tome el lugar de la Comisión Anticorrupción propuesta inicialmente por el Presidente de la República.
De acuerdo con La Jornada en línea, Murillo expresó: “Tendríamos un órgano mucho más completo. La corrupción se ha generalizado y tenemos que resolverla desde sus raíces. Una fiscalía fuerte sería mucho más eficaz que una comisión”.
Días antes, el 24 de agosto, el presidente de la Comisión Anticorrupción de la Cámara de Senadores, Pablo Escudero, informó que habían iniciado los trabajos para la elaboración de la convocatoria para seleccionar al titular de la fiscalía especializada en materia de combate a la corrupción.
Y es que el propio Murillo Karam expidió el acuerdo A/011/14, publicado el 12 de marzo de este año en el Diario Oficial de la Federación, mediante el cual creó la Fiscalía Especializada en Materia de Delitos relacionados con Hechos de Corrupción, como unidad administrativa adscrita a la Oficina del Procurador General de la República.
Según el acuerdo, el titular de la fiscalía tiene entre sus facultades dirigir, coordinar y realizar la investigación de los hechos que probablemente constituyan uno de los delitos del fuero federal materia de su competencia y del orden común, en los que ejerza la facultad de atracción.
Los delitos relacionados con hechos de corrupción son aquellos que establece el Código Penal Federal dentro de los rubros “Delitos cometidos por servidores públicos”, y “Delitos cometidos contra la administración de justicia”, además de aquellos previstos en leyes especiales.
Parece confuso que el Procurador General de la República haya propuesto la creación de una fiscalía que ya había creado él mismo. El tema central parece ser no tanto la existencia de la fiscalía, sino su alcance.
Recordemos que uno de los compromisos que como candidato hizo Enrique Peña Nieto fue el establecimiento de una Comisión Nacional Anticorrupción. La iniciativa para su creación fue presentada, antes de que asumiera la presidencia de la República, por la bancada del PRI en el Senado.
Es hasta el presente año que la Cámara de Diputados empieza a analizar y discutir el tema de la comisión. Y en este contexto es donde se da la propuesta del procurador Murillo Karam.
Podemos suponer que la idea del procurador de la República se refiere a la existencia de una fiscalía anticorrupción con mayor relevancia, tamaño y facultades que la creada por él en marzo dentro de la estructura de la PGR. Es decir, capaz de sustituir a la Comisión anticorrupción que aún no termina de aprobar el Congreso de la Unión.
No es mala la posibilidad de contar con una instancia del Ministerio Público que tenga a su cargo investigar y perseguir los actos de corrupción en el país. Sin embargo una cosa llama la atención, la idea es del PRI, fue promovida por el PRI y ahora se plantea modificarla por el mismo PRI.
O bien hay muchos PRIs dentro del PRI, que plantean en forma democrática sus oposiciones, o bien cambian de opinión conforme avanza el proceso de definición del mecanismo de combate a la corrupción, aunque no sea el que originalmente planteó el Presidente de la República. Lo cierto es que ya hay que tomar una decisión al respecto y además es oportuno escuchar a todas las voces, no sólo las afines al gobierno.
Y es que un país como México, que ocupa el lugar 106 de 177 en el índice de percepción de la corrupción de Transparencia Internacional, no puede darse el lujo de postergar la creación de sus órganos de combate a este flagelo.
Aquí hay gato encerrado paisano. Conque no sea el gato de Schrödinger, porque ese es honesto cuando lo ves y corrupto cuando no lo ves. Pero así son todos los corruptos ¿verdad? Luego dicen que la física cuántica no sirve para nada.