Malayerba Ilustrada: Los tenis

La orden del jefe no dio milímetros para otras balas ni otro par de pestañas: mátenlo. Les dio instrucciones. Los del grupo contrario debían entregar a ese, porque no hacerlo era empezar una guerra. Si no lo entregaban, los iban a aplastar. Cuando les dijo esto, el jefe piso fuerte, golpeó el piso y lo […]

Malayerba Ilustrada: El perro

  Los amigos, sus cómplices y clientes, le llamaban El Perro. Para ella solo era Adrián. Ella enamorada hasta el occipucio y él hacía un esfuerzo por quedar bien con ella, pero sobre todo con sus progenitores. No te cases con ese cabrón, no por nada le llaman como le llaman. No sé, tengo mis […]

Malayerba Ilustrada: El Licenciado

  El tío ya no lo aguantó. Era la vergüenza de la familia. Así que decidió meterlo a un centro de internamiento para adictos. Llamó a alguien y rápido llegó la voladora: una camioneta cerrada con siete jóvenes que lo tumbaron a empujones y patadas, lo ataron con manos y brazos y luego de someterlo, […]

Malayerba Ilustrada: Dios no existe

  Así dice el Cholo: Dios no existe, así como no existe mi mamá, mi papá, mi familia, mi casa. Lo que sí tiene el Cholo es una vida en la calle, desde los seis años. Una vida en la calle que le dejó el pelo largo, al estilo de los cholos de los ochenta, […]

Malayerba Ilustrada: Te van a matar

    Se lo decían los amigos, los familiares, los compañeros del gremio. Cabrón, cuídate. Estos güeyes no tienen madre. Son unos malditos. Pero él seguía escribiendo críticas y denuncias en su columna, en uno de los diarios de la localidad: apedreando con sus teclas, sus palabras, el ejercicio del poder político, la corrupción, la […]

Malayerba Ilustrada: El padrino

El padrino se vio con los ahijados. Los había citado en su casa, luego de los últimos incidentes: miren cabrones, déjense de pendejadas y no me causen más problemas… menos en mis terrenos, ya. Los muchachos, mayores de edad pero imberbes en esa incipiente carrera delictiva, habían estado asaltando camiones de pasajeros que se detenían […]

Malayerba Ilustrada: El reloj

Para Martín Amaral: que no te ganen toques ni piquetes. Era un reloj muy caro. Sumamente caro. Lo traía en la muñeca izquierda y lo tallaba como queriendo sacarle brillo. Lo empañaba con su aliento y lo restregaba con la manga de la camisa musitando que ése era el reloj que le había regalado su […]

Malayerba Ilustrada: La exhibición

Es una exhibición, le dijo el militar; la necesitamos porque aquí va a haber una exhibición y no la pueden destruir: no pueden fumigar aquí, son órdenes del alto mando. El piloto de la pegerre se quedó pasmado. Se llevó una sorpresa cuando vio a los soldados cuidando el plantío, pero esta noticia, la de […]

Malayerba Ilustrada: Cambio de bando

Tas. El sonido de la cachetada se fue pronto, el dolor se quedó: sintió caliente ese costado de la cara y la sangre hirviente bajando por la mejilla. No hizo nada. Sostuvo la mirada unos segundos y luego la bajó. Disculpe usted, patrón, respondió, mordiéndose el escroto. Qué discúlpeme ni qué la chingada, quítate de […]

Malayerba Ilustrada: Inexpertos

No sabían cómo, pero querían. No sabían sembrar y sembraron. Ni cosechar ni cortar ni empaquetar ni guardarla bajo la camioneta para trasladarla. No sabían casi nada acerca de la mariguana, pero querían. Así que sembraron en esa parcelita, entre veredas y terrenos cercanos al arroyo. Como quien acaricia la panza de su esposa embarazada, […]