Es cada vez más común dentro de las oficinas hablarnos por Whatsapp. Estamos a uno, dos o tres metros, pero así es más certero. Quizás sea porque muchos de nosotros tenemos los auriculares, lo que hace que un susurro o un grito lejano nos pase por alto
El uso de auriculares en el trabajo es una práctica común. Desde oficinas hasta fábricas, los auriculares ofrecen la posibilidad de escuchar música, realizar llamadas telefónicas o participar en videoconferencias. Sin embargo, aunque el uso de auriculares puede mejorar la concentración y el rendimiento, también tienen repercusiones en la salud y en el entorno laboral.
DAÑO AUDITIVO, EXPLOTANDO AL OÍDO
Escuchar música o cualquier tipo de audio a volúmenes elevados puede causar pérdida auditiva temporal o permanente. La Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte que más de mil millones de jóvenes corren el riesgo de perder audición debido a la exposición prolongada a sonidos fuertes, y esto incluye el uso de auriculares. Usarlos durante largas jornadas maximiza el riesgo, especialmente si no se toman pausas o no se regula el volumen.
El uso de auriculares también puede llegar a causar infecciones. Los auriculares, especialmente los que se colocan dentro del oído, pueden acumular bacterias si no se limpian regularmente, lo que aumenta el riesgo de infecciones, que varían en gravedad, desde irritaciones menores hasta otitis externa.
El uso prolongado de auriculares también puede tener efectos negativos en la postura y en el cuello. Muchas personas inclinan la cabeza hacia adelante o se encorvan mientras usan auriculares, lo que puede llevar a dolores de cuello, espalda y hombros. Con el tiempo, estas malas posturas pueden derivar en tensión muscular y rigidez.
CONCENTRARSE Y DISTRAERSE
En cuanto a las repercusiones laborales, el uso de auriculares puede tener tanto efectos positivos como negativos. Si bien pueden ayudar a mejorar la concentración, el uso de auriculares también puede tener efectos negativos en la comunicación y la colaboración entre compañeros, así como la calidad de la atención en el entorno de trabajo.
En ese sentido, la seguridad del usuario puede verse afectada. En ciertos entornos laborales, como fábricas o almacenes, el uso de auriculares puede ser peligroso, ya que puede impedir que el trabajador escuche señales de advertencia, alarmas o a sus compañeros. Esto aumenta el riesgo de accidentes laborales, lo que puede tener graves consecuencias tanto para el trabajador como para la empresa.
El uso de auriculares en el trabajo es una práctica que, aunque tiene beneficios evidentes, también conlleva riesgos para la salud y la seguridad. Algunas formas de minimizar el daño o el riesgo pueden ser regular el volumen, tomar descansos, limpiar los auriculares con regularidad, mantener una postura adecuada y no usarlos en áreas de trabajo peligrosas.
Artículo publicado el 25 de agosto de 2024 en la edición 1126 del semanario Ríodoce.