“Yo duermo tranquilo, me dedico a la encomienda que me hizo el gobernador”, declaró el hoy secretario de Turismo, Luis Guillermo Benítez, al arribar al Congreso del Estado para comparecer ante diputados por la glosa del Primer Informe de Gobierno.

El exacalde de Mazatlán tiene dos investigaciones abiertas en la Fiscalía General por presuntos hechos de corrupción y dos solicitudes de juicio político en el Poder Legislativo.

Frente a los medios de comunicación dijo estar tranquilo porque él sabe que jamás ha agarrado un peso que no le corresponde.

“Todo se va a aclarar”, dijo al ser cuestionado sobre la posibilidad de ser desaforado a petición de la Fiscalía General.

Sobre la tercera ocasión que le reprueban las cuentas públicas de su administración municipal manifestó que quienes deben ver eso son quienes llevaban la parte administrativa “porque a veces no presentan los documentos a tiempo”.

Muchas veces, argumentó, “los alcaldes no se dan cuenta de los detalles administrativos”.

Confío que en cuanto se fenezca el amparo de la empresa Azteca Ligtihing podrá recuperarse los 60 millones por concepto de anticipo por las compras de luminarias.

Sobre la observación de la ASE sobre la compra de 400 millones por adjudicación directa sin licitar, sostuvo que ya en cuatro admistraciones anteriores se habían hecho compras de la misma manera y la ASE no las había observado, por lo que se creyó que iba a ser igual.

En relación de compras de automóviles para rifarlo un Día de las Madres, caso que también sigue la Fiscalía, mencionó que esa adquisición se consultó con el entonces Tesorero Municipal y el Director de Bienestar Social.

A pregunta específica sobre si habrán fallado sus funcionarios para asesorarlo para esa compra, respondió que probablemente, pero que no le gusta culpar a nadie.