Un oso negro que buscaba agua y comida fue asesinado a balazos por pobladores en Cúmpas, Sonora, a un mes de que en Castaños, Coahuila capturaran un osezno hasta matarlo.
En un video que se ha difundido a través de las redes sociales se observa al oso, una especie protegida, correr entre las calles de un fraccionamiento, mientras se oyen gritos de las personas, hasta que logra refugiarse en el patio de una casa.
En un segundo video, se ve al animal abatido en el suelo, rodeado por tres hombres. El animal yace muerto. No hay registro de los disparos de bala con los que fue abatido.
Hasta ahora no se ha determinado quienes fueron las personas que asesinaron al animal, que está bajo peligro de extinción, de acuerdo con las autoridades ambientales.
El presidente municipal de Cúmpas, Diego Urias, lamentó los hechos y dijo que había dado la orden de investigar, además que rechazó que él o su administración hubieran dado la orden de asesinar al animal.
Los delitos contra la biodiversidad se castigan con una pena de uno a nueve años de prisión y por el equivalente de 300 a tres mil días de multa, de acuerdo con la fracción III del artículo 420 del Código Penal Federal.
El oso negro es una especie protegida no sólo por la legislación mexicana en la NOM-059, en la categoría de “Peligro de Extinción”, sino también por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) no ha informado nada sobre alguna visita de inspección o acta administrativa abierta para investigar el asesinato de este oso negro en Sonora, y castigar a los responsables de matarlo a balazos.
