Un estudio publicado en Annals of Internal Medicine reveló que las personas que sufren de dolor crónico pueden encontrar un alivio de leve a moderado en el corto plazo cuando utilizan ciertos productos de cannabis medicinal por prescripción que tienen una mayor proporción de THC frente al CBD; sin embargo, advierte sobre algunos efectos secundarios preocupantes.
El tetrahidrocannabinol, o THC, es el compuesto químico de la planta de mariguana que produce el efecto psicoactivo de la droga; mientras que el cannabidiol, o CBD, es el segundo compuesto químico activo con mayor prevalencia en el cannabis, pero no produce efectos.
Yasmin Hurd, profesora de ciencias farmacológicas, neurociencia y psiquiatría de la Facultad de Medicina Icahn del Monte Sinaí de Nueva York señaló que “los resultados coinciden con lo que sabemos”.
“Hay algunas señales de un alivio del dolor entre leve y moderado en función de la proporción de THC/CBD. Pero, hay un aumento de los efectos secundarios, como mareos y sedación”, dijo Hurd, quien es directora del Instituto de Adicciones del Monte Sinaí.
Sin embargo, no se han encontrado tales beneficios en los extractos de THC o CBD de la planta de marihuana entera que son de venta libre.
“Desgraciadamente, la evidencia disponibles no resulta concluyente en gran medida, debido al escaso número de estudios y a la variación de los productos cannabinoides entre estos estudios”, apuntó Jodi Gilman, profesora asociada del Centro para Medicina de la Adicción de la Universidad de Harvard, quien no participó en el estudio.
“Se necesitan grandes ensayos controlados con placebo en cientos de pacientes que tomen exactamente el mismo producto en las mismas dosis para entender los beneficios y riesgos del cannabis para tratar el dolor crónico”, añadió Gilman.
La revisión analizó 25 ensayos clínicos y estudios de observación que involucraron a casi 15 mil personas.
Los investigadores encontraron que los fármacos de prescripción dronabinol, un compuesto de THC sintético puro, y nabilona, que es casi THC puro, se vincularon a un alivio moderado del dolor, pero con un mayor riesgo de somnolencia y mareos.
Nabiximols, un fármaco con cantidades comparables de THC y CBD, mejoró el alivio del dolor y la función en menor grado, pero también conllevó a un riesgo de sedación, mareos y náuseas, según el estudio publicado el lunes.
Los efectos secundarios hicieron que algunos pacientes dejaran de usar los productos, aunque “también son efectos secundarios comunes de otros medicamentos para el dolor”, apuntó Gilman.
Los pacientes que utilizan cannabinoides para el dolor deben tener una “supervisión cercana de sus médicos para determinar si estos productos son útiles”, dijo Gilman, y determinar si algún beneficio supera los posibles efectos secundarios.
“Aunque la cantidad de alivio del dolor no es sustancial, los individuos que sufren de dolor crónico podrían pensar que vale la pena el riesgo. Está claro que el CBD tiene un perfil de seguridad mucho mayor que el THC. Por lo que es importante que los productos con alto contenido de THC se controlen cuidadosamente”, dijo Hurd.
“Es fundamental que los pacientes consideren los productos convencionales aprobados clínicamente antes de probar el cannabis”, dijo. “Además, tienen que ser extremadamente cuidadosos con respecto a los productos de cannabis que utilizan, ya que hay muchos productos que no tienen un buen control de calidad y que incluso podrían no contener la cantidad de THC o CBD que creen basándose en el envase”.
Además, Hurd advirtió que “no es adecuado fumar cannabis ‘recreativo’ como medicina”. Al igual que el tabaco, fumar marihuana puede dañar los pulmones y aumentar el riesgo de enfermedades respiratorias. El consumo excesivo de cannabis se ha asociado a un mayor riesgo de ataques cardíacos, dijo.
(Con información de CNN)
