El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció este jueves una nueva estrategia para combatir el avance del COVID-19 en el invierno, para proteger a la población ante la presencia de la variante Ómicron en el país.
Detalló que su plan incluye nueve puntos, en un discurso en los Institutos Nacionales de Salud (NIH), luego de que se detectaran dos casos de la nueva variante, uno en California el día miércoles, y otro en Minnnesota este jueves.
Será a partir de la próxima semana que se estarán aplicando las nuevas medidas estratégicas, dijo.
Aclaró que este plan no implica el cierre o bloqueo en el país, sino que se aplicarán vacunas generalizadas, refuerzos y pruebas.
Los viajeros que ingresen al país deberán presentar una prueba negativa de PCR o de antígenos, la cual deberá ser realizada 24 horas antes, así como contar con el expediente de vacunación completo.
Anunció también que será obligatorio el uso de cubrebocas en aviones, barcos, trenes y transporte público, y de no acatar las medidas se aplicarán multas que vayan de los 500 a los 3 mil dólares.
Afirmó que se implementaran estrategias para tener un mayor alcance en la aplicación de vacunas, garantizando que un aproximado de 100 millones de estadounidenses sean elegidos para reforzar la vacuna contra el COVID-19.
Detalló además que se facilitarán pruebas gratuitas en centros de Salud y clínicas locales para aquellos que no cuentes con un seguro privado, y se implementarán nuevos pasos para aumentar el número de pruebas.
