No hay transparencia, hay simulación, acusan

A la secretaria de Transparencia y Rendición de Cuentas, Guadalupe Yan Rubio, le tocó cerrar la ronda de funcionarios del gobernador Quirino Ordaz Coppel que acudieron a comparecer al Congreso del Estado.

El encuentro fue áspero por la insistente acusación de los diputados de Morena PAS y MC, de que la transparencia y rendición de cuentas con el gobernador saliente había sido una simulación permanente en la administración pública.

La presidenta de la Comisión de Trasparencia, Anticorrupción y Participación Ciudadana, Cecilia Covarrubias González, le señaló a la funcionaria estatal que su secretaría tuvo la intención de constituirse en “tapadera del discrecional gasto público”.

Su argumento estuvo centrado en su incumplimiento como funcionaria que encabeza un órgano de control, ya que en lugar de vigilar que el presupuesto se aplicara dentro de lo planeado, no evitó que la característica del gasto fuese el dispendio, lo superfluo y la frivolidad.

El encuentro con los diputados se convirtió en un resumen de los casos escandalosos en los que se presumieron faltas graves vinculadas a actos de corrupción.

La poca transparencia en la adquisición del edificio Homex, el gasto en las aeronaves propiedad del gobierno estatal, los adeudos al IPES, las retenciones a trabajadores no pagadas al ISSSTESIN, el derroche ilegal de propaganda personalizada con el “Puro Sinaloa”, las faraónicas obras en estadios en favor de unos cuantos amigos, fueron solo unos de los temas señalados.

Al referirse al poco compromiso con el tema de anticorrupción, los diputados como Cecilia Jáuregui, de Movimiento Ciudadano, reclamó a Yan Rubio cómo se evitó que fuese a la cárcel el exsecretario de Finanzas Armando Villarreal, que había sido denunciado por un desvío de más de 260 millones de pesos, pagara solamente 2 millones de pesos en abonos e hiciera una disculpa pública.

En los ejemplos de impunidad recordó el caso del Tiburonario en el Acuario Mazatlán, en donde se detuvieron a tres empleados menores que prometieron reparar el daño, posteriormente fueron liberados y que no han devuelto un solo peso de los casi 90 millones de pesos que costó la obra.

La comparecencia de la funcionaria sirvió también para reclamarle su poco interés en acciones anticorrupción, al ponerle como ejemplo el caso del exsecretario de Salud, Ernesto Echeverría, que desvío 481 millones de pesos, pero con 7 millones burló la cárcel.

“Ni una sola pluma le quitaron a la impunidad del pasado y del presente”, aseguró la diputada de MC al calificar además como una entelequia al Sistema Estatal y Municipal Anticorrupción que se convirtió en un membrete sin dirección, recursos y futuro.

Los diputados coincidieron en señalar que el solo tener una Secretaría de Transparencia y Rendición de Cuentas no hace a un gobierno transparente.

Los diputados fueron respetuosos en el trato con la funcionaria, a quien incluso le dijeron que habían utilizado su prestigio personal en propósitos que pervierten los nobles fines de las funciones públicas.

Yan Rubio, de lo señalado por los diputados de los diversos partidos, con excepción del PRI, aseguró que durante la administración de Quirino Ordaz Coppel se había avanzado en transparencia y rendición de cuentas, al eliminar viejos vicios que daban como resultado observaciones y como prueba de ella indicó que en el informe de la cuenta pública de la Secretaria de la Función Pública había cero observaciones en la cuenta de 2019, así como en las revisiones de la Auditoría Superior de la Federación en el 2020. De las observaciones de la Auditoría Superior del Estado, no hubo ni una sola referencia.

Con la voz frágil que la caracteriza, la secretaria aseguró que la corrupción no es algo que se pueda probar con una frase o una acusación, sino con la verdad material y respetando los derechos humanos, de lo contrario se debe reconocer la no culpabilidad.

Artículo publicado el 31 de octubre de 2021 en la edición 979 del semanario Ríodoce.