La presidente de la Comisión de Derechos Humanos, Angélica Díaz Quiñonez, alertó sobre el incremento de niños pidiendo dinero a los automovilistas o las personas que transitan en las zonas céntricas o cercanas a plazas comerciales de Sinaloa.
Los niños, expresó, no deberían estar en las calles siendo explotados por personas que los envían a pedir dinero, y que en muchos casos son los propios padres familia, cuando lo correcto es que deberían estar disfrutando de su infancia.
La diputada del PAS hizo un llamado a los padres de familia a evitar cualquier práctica de explotación infantil hacia sus propios hijos, así como un exhorto a las autoridades de la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes del Estado, Sistema Estatal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA) y al Sistema DIF Sinaloa a que redoblen esfuerzos en estas épocas en que la presencia de los menores de edad aumenta en las calles de los municipios de Sinaloa.
Invitó a la ciudadanía a que denuncie ante las autoridades cualquier práctica de explotación infantil que observen en las calles, ya que este es un mal que se necesita erradicar por completo y sólo involucrándonos todos se logrará.
Recordó que en Sinaloa el Código Penal para el Estado, ya contempla penas para quienes cometan el delito de explotación de menores, sin embargo, esto debe de venir complementado con políticas públicas en materias de salud, educación, alimentación, seguridad, para que las autoridades puedan hacer algo más cuando se presenten estos casos.
Mencionó que el PAS presentó una iniciativa sobre una Ley que Regula los Derechos Humanos y sus Garantías del Estado de Sinaloa, que permitiría la creación de albergues para niños en situación de calle, especialmente aquellos que sufren alguna discapacidad o que pertenecen a comunidades indígenas, los cuales vendrían a complementar las acciones que ya vienen realizando algunas de las autoridades competentes.
“Por el bien de nuestros niños y niñas de Sinaloa, debemos rechazar cualquier forma de normalización y justificación de la explotación que sufran, por lo que la sociedad debe mostrar su indignación ante estos casos”, concluyó.
