La presidenta de la Comisión de Equidad, Género y Familia, Francisca Jordá, cuestionó que la falta de voluntad del gobernador ha impedido que se fortalezca el Centro de Justicia para las Mujeres de Culiacán.
En tribuna, la diputada de Morena llamó al mandatario a cumplir su promesa de ser aliado en la lucha y construir al menos tres centros de justicia más en el estado.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, expuso que los Centros de Justicia para la Mujer buscan fortalecer el acceso a la justicia por medio de un proceso de autovaloración para detener la violencia.
Mencionó que estos centros son el resultados de la suma de esfuerzos y recursos entre el Gobierno de la República, las entidades federativas y organizaciones de la sociedad civil, para la creación de espacios que concentran bajo un mismo techo servicios multidisciplinarios tales como: atención psicológica y médica, atención jurídica y salas de juicio oral, albergues temporales para mujeres con sus hijos, entre otros.
Abeyó Jorda recordó que cuando en 2017 fue inaugurado el Centro de Justicia para Mujeres, el gobernador aseguró que su gobierno sería modelo de protección y ayuda a este sector de la población.
Sin embargo, indicó que la falta de voluntad del ejecutivo estatal para contribuir económicamente, impidió que se aplicaran subsidios en la construcción de tres centros proyectados en Ahome, Guasave y Mazatlán, municipios con Declaratoria de Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres.
Lamentó que la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (CONAVIM) autorizó para Mazatlán 17.2 millones de pesos, pero el gobierno estatal no envió los documentos requeridos en tiempos y forma, lo que mostró la clara falta de interés en el tema.
En su intervención, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, Angélica Díaz Quiñonez, advirtió que en el contexto de la emergencia sanitario han aumentado los riesgos de violencia contra las mujeres y las niñas, especialmente la violencia doméstica, debido al aumento de las tensiones en el hogar.
El aislamiento y la crisis económica hace más vulnerables a las mujeres por ser en su mayoría quienes dependen económicamente de sus parejas, por lo que en casos de violencia pueden enfrentar obstáculos adicionales para huir de situaciones violentas o para acceder a órdenes de protección o servicios esenciales que pueden salvar vidas por las restricciones de la circulación o la cuarentena, expuso.
La diputada del PRI, Mónica López, coincidió que el problema de la violencia en contra de las mujeres se ha agravado durante este confinamiento provocado por la terrible pandemia del coronavirus.
Gracias, dijo, a un enorme esfuerzo colectivo, se han conquistado diversos derechos legales, institucionales y sociales, y se observa que poco a poco la dimensión que antes tenía la violencia por razones de género, ha venido disminuyendo, pero aún no es suficiente.
