Para empoderarse dentro de los ayuntamientos, los síndicos procuradores buscan unidos reformas a la Ley de Gobierno Municipal. Al interior de las comunas hay registro de desencuentros, los más recientes en Ahome y Mazatlán, con motivo de la reelección de los titulares de los órganos internos de control.

Unidos los síndicos no están de acuerdo en que tengan más peso los titulares de los Órganos Internos de Control aprobados por los cabildos, que ellos que fueron electos por la ciudadanía en un proceso constitucional.

Aunque las mayores controversias de los síndicos procuradores por tratar de ejercer sus facultades se han registrado a lo largo de la gestión municipal en Ahome, Mazatlán y Culiacán, la propuesta de reforma está respaldada también por sus homólogos en Sinaloa, Elota, Escuinapa, Guasave y El Fuerte.

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La propuesta se concretó con la presentación de una iniciativa de reforma que tiene como objeto ampliar las facultades del Síndico Procurador, para incluir atribuciones que les permitan vigilar a las autoridades y a los servidores públicos de los municipios.

Frente a la presidenta de la Junta de Coordinación Política, Graciela Domínguez, y el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, Horacio Lora, los síndicos acudieron a exponer su preocupación por la degradación de sus facultades. Fue la primera ocasión que estuvieron juntos, frente a los diputados para exponer de viva voz su situación.

La inquietud de los síndicos procuradores por empoderarse por la vía de una reforma a la Ley de Gobierno Municipal no es nueva, su presentación se hizo desde el 13 de junio de 2019, incluso ya recibió la primera y segunda lectura y está desde hace meses en espera de ser dictaminada en la Comisión de Puntos Constitucionales y Gobernación.

Frente a los diputados, la síndica de Culiacán, Sandra Martos, fue enfática en expresar que acudían al Congreso sin el ánimo de generar controversias, sino solamente para fortalecer la figura del Síndico Procurador. “Hemos sufrido esta situación precaria”, dijo al exponer la situación que han tenido a lo largo de su gestión.

La falta de mayor precisión de las facultades del Síndico Procurador, expusieron, ha llevado a algunos municipios a tratarlos como integrantes del Ayuntamiento como un regidor más, incluso que le se incluya en comisiones de Cabildo, situación que no solamente representa una doble carga de trabajo, sino que lo coloca en un riesgo de incurrir en un conflicto de interés al votar en determinados asuntos como, por ejemplo, la aprobación de las cuentas públicas resultantes de la actuación de servidores públicos que el Síndico Procurador está obligado a revisar.

Tampoco, advierten, es un simple auxiliar del Ayuntamiento, calidad que algunas opiniones le atribuyen, sino una verdadera institución para la que el andamiaje constitucional y legal debe ser reforzado.

“La figura del Síndico Procurador cobra una relevancia trascendental en el combate a la corrupción desde el ámbito municipal”, aseguraron.

Los nueve síndicos que firman la propuesta plantean tener la facultad de proponer el nombramiento del titular del Órgano Interno de Control al Cabildo, pero se amplié la facultad de designarlo de manera directa, así como removerlo, toda vez que la Ley de Gobierno Municipal vigente no contempla las hipótesis para su remoción.

Señalaron que cuando asumieron el cargo de síndicas procuradoras los titulares de los órganos internos de control ya habían sido electos por las administraciones que estaban dejando el cargo, lo que ocasionó un problema para operar conforme marca la ley con ese brazo ejecutor.

“Ha habido una confusión y una interpretación a conveniencia”, expresó la síndica de Culiacán al exponer que los Órganos Internos de Control operan desfasados.

Aseguró que no están pidiendo algo totalmente absurdo o fuera de contexto, sino simplemente buscando consolidar las responsabilidades, funciones y derechos que conforme a ley tienen los síndicos procuradores.

“Los órganos internos de control no han entendido que es un trabajo colegiado y que tienen una dependencia de los síndicos procuradores legalmente”, dijo a los diputados.

En su intervención Angelina Benítes, síndica procuradora de Ahome, expuso que con el Sistema Estatal y Municipal Anticorrupción, se planteó que fuera autónomo, cuando la Ley de Gobierno Municipal señala que es autonomía técnica solamente, sino un brazo ejecutor del Síndico Procurador.

Hay lagunas en la ley sobre cómo se puede remover al órgano interno de control, aseguraron.

La síndica de Mazatlán, Elsa Isela Bojórquez, explicó que cuando entraron en funciones, algunos Órganos de Control por ley estaban ya ahí por tres años, además podían ser reelectos. El problema fue que cuando les solicitaban información sobre lo que estaban revisando se negaron incluso por escrito.

Luis Alberto Lugo Gaxiola, síndico del Fuerte, señaló que en su caso fue realizado un cambio, pero deben ser atendidas las lagunas legales sobre la remoción para tener un equilibrio y no se dependa de la voluntad del alcalde.

Alma Rosa Tirado Valdez, síndica de Elota, aclaró que la propuesta no corresponde a pleito entre órganos internos y síndicos procuradores ni a diferencia entre síndicos y presidente, sino que corresponde al fortalecimiento de la figura del Síndico Procurador, como un contrapeso.

“Hay situaciones en donde los órganos internos de control llegaron a hacerse de cierta forma cómplices de acciones no honestas dentro del ejercicio del poder. Están blindados en sus puestos en tres años, hagan su trabajo o no lo hagan, lo hagan bien o lo hagan mal”.

Sandra González, síndica de Navolato, lamentó que los síndicos están quedando en desventaja en relación a los órganos internos de control, aunque en su caso sí hizo la propuesta de ese nombramiento.

Advirtió que existe el riesgo que esos funcionarios se aliaran con los órganos internos de control para hacer a un lado al síndico procurador.