El modelo Centinela es una buena idea que está bien establecida en varias áreas de estudio. No se le puede pedir a México que mida igual que otros países más desarrollados los contagios por Covid-19, coincidieron en exponer integrantes del grupo científico responsable del modelo matemático de proyección de brotes del Covid-19 que emplea la Secretaría de Salud.
De acuerdo a una publicación de La Jornada, el modelo es confiable y funcional, declaró Antonio Capella, del Instituto de Matemáticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (IMUNAM), y Marcos Capistrán y Andrés Christen, del Centro de Investigación en Matemáticas, miembros del grupo científico Modelo C^3.
A convocatoria de la Secretaría de Salud, el Grupo CIMAT-IM-UNAM C^3 ha estado trabajando en la aplicación de un modelo predictivo de la evolución de brotes de Covid-19 y de la dinámica de servicios hospitalarios, además de cuantificar la incertidumbre que circunda a sus propias predicciones.
De acuerdo con información difundida por el IMUNAM, el grupo científico considera importante saber cómo se va a administrar el contagio cuando sea inevitable el regreso paulatino a la actividad social y económica.
Por ello, actualmente están trabajando en incluir en el modelo una diferenciación de grupos de edad y la regionalización de las medidas de mitigación, pues ya no es posible hablar de una epidemia a nivel nacional, sino más bien de múltiples brotes locales o regionales.
Por otra parte, Alejandro Macías, integrante de la Comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia del Coronavirus, planteó que el regreso a las actividades luego de la etapa crítica de la pandemia deberá ser pausado, porque de lo contrario, la reactivación de las labores podría traer consigo un rebrote de Covid-19.
En un mensaje dirigido a la comunidad universitaria, expuso que “la salida de esta situación debe ser paulatina, regionalizada y por distintos sectores. Tenemos que acostumbrarnos a tener la guardia alta, pues aunque parezca que hemos vencido al virus, puede volver mientras no exista una vacuna”.
Macías pidió mantener la calma y no caer en la desesperación ante el hecho de que el virus seguirá afectando a la humanidad durante los siguientes años, lo que llevará a que deban seguirse aplicando por mucho tiempo medidas de prevención de los contagios y de distanciamiento físico y social.
Macías, infectólogo egresado del posgrado de la UNAM, señaló que “después de la cuarentena seguirán los casos de infecciones a cuenta gotas. Falta mucho por recorrer”.
Por ello, es necesario seguir las recomendaciones de las autoridades de salud, “todos debemos escucharlas, aunque nos parezcan exageradas, porque no lo son”. Asimismo, pidió no propagar noticias falsas, evitar la infodemia (sobreinformación sobre un tema, sea falsa o no), propagar mensajes concretos y consultar sitios oficiales.