Los últimos tres meses de su corta vida Memito los pasó maltratado.
Su abuelastro, Saturnino, lo regañaba, pegaba, “zangoloteaba de las greñas” y lo dejaba parado en el sol durante horas y sin comer, hasta el 2 de noviembre pasado cuando lo dejó inconsciente.
Ese día, Saturnino agarró al niño de 6 años del cuello y lo aventó contra una barda. Memito cayó inconsciente y 13 días después murió en el hospital Pediátrico.
El abuelastro de 62 años, fue detenido el lunes en Cosalá y el martes vinculado a proceso penal por el delito de homicidio calificado producido por golpes contusos cometido con ventaja y violencia familiar equiparada.
El maltrato de Memito empezó en agosto de este año, cuando su mamá Loreni se los trajo a él y a su hermanita de 2 años a vivir con su padrastro Guillermo.
Semanas antes, Loreni había conocido a Guillermo por medio de Facebook y decidió venirse de Badiraguato a vivir con él al fraccionamiento Capistrano.
En la casa también vivían los papás de Guillermo, Saturnino y María, originarios de Cosalá.
Loreni consiguió trabajo y dejaba a sus hijos al cuidado de sus suegros, a quienes pagaba mil pesos a la quincena.
Mientras ella no estaba sus hijos eran maltratados, según testimonios de los vecinos.
Cuando la joven llegaba a la casa en las noches, Memito varias veces le platicó que a él y a su hermanita los regañaban y les pegaban.
“No me quieren, por todo me maltratan”, dijo el niño en una ocasión.
Loreni reclamó a Guillermo, pero éste contestó que sus papás no querían al niño porque era muy travieso y que si le llamaban la atención era porque tenía que aprender a portarse bien.
La noche del 31 de octubre, Memito dijo a su mamá que le dolía la cabeza y sus suegros afirmaron que el niño se había caído de la barda y después cambiaron la versión a que había caído del barandal.
El niño dijo que sí se había caído de la barda pero de espaldas, que la cabeza le dolía porque Saturnino le había pegado y lo aventó.
Loreni volvió a reclamar su pareja que sus papás maltrataban el niño y él respondió que eran mentiras de Memito.
Al día siguiente, la noche del 1 de noviembre, Memito volvió a decir que Saturnino le había pegado y lo había jaloneado del brazo.
La mañana del 2 de noviembre, Saturnino volvió a golpear a Memito y fue la última vez.
Alrededor de las 11:00 horas, Saturnino empezó a gritar al niño, lo agarró del cuello, lo aventó contra una barda y se golpeó la cabeza.
Una vecina que pasaba por el andador en el que se encuentra la casa, vio cuando el niño salió volando y se estrelló en la pared.
La mujer corrió a auxiliarlo y cuando trató de levantarlo Memito se desvaneció, en eso se acercaron María y Saturnino y se llevaron al menor al hospital Pediátrico.
Cuando trasladaban a Memito, María avisó a Loreni que llevaban al niño al hospital porque se había caído de la barda.
Después de eso, ya no se supo nada de Saturnino, María y Guillermo. Sacaron muebles de la casa en Capistrano y se fueron a Cosalá con la otra hija de Loreni.
Días más tarde le hablaron a Loreni para decirle que tenían a la niña en Cosalá y fue por ella. Ahí vio a Saturnino y cuando preguntaba que había pasado con el niño, se quedaba callado y nervioso.
Mientras Memito estaba internado, Guillermo habló con Loreni y la amenazó para que dijera que el niño se había caído de la barda, que si decía otra cosa publicaría en Facebook un video en el que ella le está pegando al niño y que conocía gente armada.
Memito murió la tarde del 15 de noviembre. Y la autopsia reveló que tenía golpes recientes y antiguos y presentaba síndrome de niño maltratado.
La madrugada del lunes pasado, Saturnino fue detenido en Cosalá y el martes llevado ante el Juez.
El hombre de aproximadamente 1.70 metros de estatura, complexión robusta, tez morena y cabello completamente cano, salió a la sala de audiencias esposado, vestido con camisa a cuadros azul con gris, pantalón de mezclilla y huaraches de vaqueta.
Sentado junto a su abogado, escuchó la imputación que hizo la Ministerio Público, con la cabeza agachada y ocasionalmente veía hacia el público, se frotaba los dedos, se mordía las uñas o tocaba el escritorio y hacía círculos con los dedos.
Durante alrededor de dos horas en la sala de audiencias leyeron los testimonios de los vecinos que declararon en su contra.
Los vecinos narraron que eran frecuentes las agresiones al niño, que lo dejaban parado en el sol mucho tiempo y lo metían antes de que llegara Loreni, “lo zangoloteaba de las greñas”, y que a veces le daban de comer a Memito porque los abuelastros no lo hacían.
Una vecina dijo que vio cuando Saturnino aventó a Memito contra la pared y trató de auxiliarlo; y otro vecino también fue testigo, ya que se encontraba en la calle cuando ocurrió la agresión.
El Juez consideró que los datos de prueba eran suficientes para presumir la posible responsabilidad y dictó auto de vinculación por homicidio calificado producido con golpes contusos cometido con ventaja y violencia familiar equiparada.
La Fiscalía General del Estado tiene un plazo de cuatro meses para terminar con la investigación complementaria.
El abogado defensor pidió al Juez que solicitará al director del penal que tome medidas precautorias para salvaguardar la vida de Saturnino, ya que desde que ingresó recibió amenazas de parte de otros reos.
Artículo publicado el 22 de diciembre de 2019 en la edición 882 del semanario Ríodoce.