El Comité Ciudadano “Por un Mochis Mejor” denunció que las obras de reparación de drenajes sanitarios colapsados que realiza la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome (Japama) son un desorden porque no sigue un plan rector que resuelva la emergencia urbana.

“Las obras tienen un patrón que no tiene patrón, ni plan. Son sólo para atacar puntos colapsados aquí y allá”, dijo Héctor, Hallar Zepeda, primer representante del organismo intermedio de creación reciente.

El grupo civil que fue presentado a la comunidad está integrado por Ingrid Aguirre Armenta, Gilberto Navarro Rodríguez, Bernardo Loose Doedter, Hernán García Castro, Milo Soto Ibarra, Fausto Flores Paredes, Jorge Yamuni Robles y Óscar Alatorre Beltran, afirmó que las reparaciones parecen de ocurrencia y para acallar las protestas sociales, aunque no en todas..

Por esa condición, una lluvia importante las convertirá en basura, y será dinero perdido, opinó.

Hallal Zepeda comentó que el desorden es informativo también pues al momento han anunciado 650 millones de pesos en inversión, pero sólo se tiene 110 millones gastados lo que representa un 3 por ciento de los 3 mil 500 millones de pesos para recomponer el colapso del drenaje sanitario que ocurrió el pasado diciembre del 2018 cuando azotó la depresión tropical 19-E.

El 26 de agosto anunciaron una inversión de 80 millones de pesos, pero hasta ahora no hay licitación conocida, los drenajes de Arboledas y Scally que prometieron atender no están programadas, y recurrieron al endeudamiento antes que explorar otras opciones.

Dijo que la autoridad municipal actual está actuando igual que administradores anteriores, de ocurrencia, pese a que en sus manos tiene un plan rector de drenaje pluvial y sanitario que fue elaborado por investigadores de red hidráulica, profesionistas de renombre y prestigio, facultades y colectivos que lograron identificar los puntos críticos y su solución práctica y sin grandes inversiones.

De continuar las acciones actuales, todo será basura, precisó.

“Los tres órdenes de gobierno, es un hecho, no han dimensionado el alcance de las consecuencias que ponen en riesgo la viabilidad de Los Mochis como polo de desarrollo, cabecera de uno de los motores agrícolas del país.

“A más de un año de la tormenta, a expensas en cualquier momento a otra, es inconcebible que se señale la falta de recursos o de presupuesto para lo que evidentemente es un asunto de emergencia, donde viven más de medio millón de personas”, aseguró.