El jueves 13 de septiembre, la información de que en el patio trasero de una casa demolida que había sido asilo de ancianos en Los Mochis habían encontrado dos osamentas, llegó tan fría como la muerte.

“Reporta ciudadano que hay dos osamentas en la dirección indicada, hace dos días encontraron una fosa en el lugar (presumiblemente con otra osamenta)”, decía el mensaje que aseguraba que el descubrimiento había sido aproximadamente a las 9:15 horas.

El hallazgo de las tres osamentas humanas en la casa ubicada en la calle Río Baluarte 512 en la colonia Ferrocarrilera, hizo recordar las dolorosas expresiones de las madres con hijos desaparecidos que diario viven su vía-crucis en la zona sur de Sinaloa.

“Uno tiene derecho a que le entreguen a uno sus hijos (de preferencia con vida)… pero ni vivo ni muerto ni nada”, comunicaban esta inconformidad a la diputada Graciela Domínguez Nava durante su estancia en Mazatlán, el Día Internacional de la Desaparición Forzada.

“El problema de la impunidad en Sinaloa va en crecimiento y el problema de desaparecidos, en los últimos días se ha incrementado”, dijo Domínguez Nava.

Los siguientes testimonios de madres con hijos desaparecidos fueron expresados de viva voz a la diputada Graciela Domínguez Nava, quien sostuvo un diálogo improvisado con ellas frente al Teatro Ángela Peralta.

“¿Qué pudo haber hecho?”

“A mi me levantaron a mi nieto José Luis Mujica López, de 16 años de edad, el día 4 de febrero, como a las 10:00 de la noche de la casa de la novia, allá en Concordia, van siete meses ya y hasta ahorita no he sabido nada de él”, relata la abuela del menor privado ilegalmente de la libertad, por un grupo de hombres armados.

La señora de 60 años de edad portaba en sus manos una fotografía de su nieto, mientras sollozaba y explicaba a la diputada Graciela Domínguez su doloroso peregrinar de un lado a otro, hasta que decidió acudir al presidente Municipal de Concordia, Felipe Garzón.

“Al mes de levantado mi nieto, fui con el presidente y le dije: ‘oiga ya tengo un mes que no se ha hecho nada, y él me dijo: estoy fuera de noticias'”, recordó.

Ante la respuesta del primer munícipe, la abuela del menor de edad, víctima de desaparición forzada, replicó a Garzón: “pero cómo va a estar fuera de noticias si (el día que fue privado de su libertad) se dio parte aquí en Concordia y en Mazatlán”.

“Es que no estoy enterado”, refiere que le dijo el alcalde de Concordia, a lo que ella contestó: “oiga si en todos los celulares está todo eso”.

—¿Usted es su abuela? —preguntó la legisladora Graciela Domínguez.

—Soy su abuela, y ando buscando a mi nieto, porque su mamá está bien enferma, tiene cáncer en el estómago.

—Vamos a hacer una lucha entre todos para poder acabar con esta situación — aseguró la legisladora.

—Los que lo levantaron a él ahí se la pasan en Concordia, a como me dijeron que eran los carros que lo levantaron ahí se la pasan. No se hace nada. Nada se ha hecho. Mi muchachito apenas 16 años iba a cumplir, oiga. 16 años, un niño. ¡Un niño que está empezando a vivir! ¿Qué pudo haber hecho?

Zeus Posada

También la mamá de Zeus Posada, de 28 años de edad, joven chofer de Uber que desde la noche del 1 de agosto salió a trabajar y ya no regresó, manifestó su angustia y pidió a la diputada que la ayudara.

“Tenía 28 años, salió a trabajar en el carro de Uber, y también era vendedor de flores de alcatraz, que vendía en Culiacán, y mucha gente lo conocía en Culiacán”, dijo la angustiada madre del joven Zeus Posada.

La representante popular dijo: “Sí, son situaciones muy complicadas, ayer tuvimos una reunión con el fiscal general y quedamos en una reunión con él, amplia, en donde pedimos tener información más clara de qué está pasando, por qué, cuando suceden estos casos, pues no hay prontitud en encontrarlos”.

“Perdone que la interrumpa”, intervino la madre de Zeus Posada:

“El teléfono de mi hijo, de hecho lo estuvieron usando (sus captores), yo les mandaba mensajes, rogándoles a esas personas que tienen a mi hijo, me contestaron, pero solamente con un buenas noches”.

—¿Y todo eso, ustedes se lo han dicho a la autoridad? —quiso saber Domínguez Nava.

—Todo eso se lo entregué a la autoridad —respondió la damnificada.

—¿La autoridad les ha dado algún elemento o ¿nomás les dicen que están investigando?

—Qué están investigando. Ya están investigando, pero realmente no están investigando bien.

—No, pues la acompañamos solidariamente en esta lucha que usted está dando y nosotros vamos a seguir insistiendo que estos casos sean atendidos con prontitud y se resuelvan. Y esperemos que encuentren a sus hijos con vida — dijo la diputada.

Ese 30 de agosto, cuestionada sobre qué hacer para no alargar el peregrinar de las madres con hijos desaparecidos, la política de Morena manifestó que necesitaban que las autoridades pongan más empeño en dicho problema.

“Nosotros ya hicimos el trabajo desde el Congreso del Estado, para que Sinaloa cuente con una Ley de Desaparición Forzada, y lo que esperamos es que este marco normativo ya les dé las facultades que antes no tenían”, enfatizó.

Prometió que buscaría una reunión con el fiscal de los sinaloenses, con el objetivo de que atienda y resuelva el problema de la desaparición forzada.

“Y sobre todo que en pocas horas puedan encontrarlos (a los desaparecidos) con vida, esa es la apuesta que debemos de hacer como autoridades y como sociedad y en ese sentido vamos a priorizar (la exigencia) en la reunión que tengamos con el fiscal”, aseguró Domínguez Nava.

Artículo publicado el 15 de septiembre de 2019 en la edición 868 del semanario Ríodoce.