Dos empleados de Liconsa que quedaron en medio del fuego cruzado entre dos grupos rivales, fueron rescatados por personal militar, horas después del enfretamiento.
Identificados como José Manuel “N” de 42 años de edad y otro civil de apellido Méndez “N” también de 42 años de edad, ambos con domicilio en el municipio de Rosario, se detalló que el primero presentó una herida de bala en la cabeza tipo rozón, y el segundo una lesión similar, pero en el abdomen. Ninguno de los dos fue considerado de gravedad.
Fuentes federales informaron que la agresión ocurrida en La Rastra, donde murió una pareja y un niño de nueve años resultó herido durante las primeras horas del viernes, continuó resultado heridos dos civiles más que iban rumbo a Plomosas a bordo de una camioneta Chevrolet S10, para cobrar facturas de abarrotes en esa comunidad.
En su testimonio, los empleados de Liconsa aseguraron que no escucharon los disparos y que la salir de La Rastra, a unos 100 metros observaron a un hombre vestido de negro portando un arma larga, y quien al percatarse de la presencia de éstos, descargó su arma en contra del vehículo.
Los disparos hicieron blanco en el vehículo rotulado de Liconsa, por lo que retrocedieron y huyeron del lugar, pero fueron vistos por el otro grupo rival que también empezó a disparar.
En medio de la lluvia de balas, se internaron a bordo del vehículo en el monte donde permanecieron mientras continuaban que los disparos entre ambos grupos continuaba. Minutos después cesaron las detonaciones y escucharon el paso de unas cinco camionetas que eran conducidas en dirección de la cabecera municipal de Rosario.
A pesar de que el enfrentamiento ya había transcurrido, permanecieron ocultos y no salieron hasta que vieron un convoy militar a quien le pidieron ayuda.
Fue en el transcurso de la tarde-noche del viernes, que los militares bajaron al par de civiles y se coordinó con la Fiscalía para que se iniciara la carpeta de investigación.