Al micrófono, en plena sesión del pleno el Congreso del Estado, el diputado de Morena, Florentino Vizcarra, confesó que recibió 300 mil pesos. “Yo fui una persona que se prestó al chantaje en una ocasión, pero ellos ocuparon como para chantajearme a mí también”, dijo desde su curul.
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La revelación se produjo luego que su compañero de bancada, el diputado Juan Ramón Torres Navarro, denunció de viva voz durante la sesión ordinaria, que a Florentino Vizcarra le había ofrecido dinero la legisladora panista Roxana Rubio para que votara a favor de la propuesta del gobernador del Presupuesto de 2019 que defendió el Grupo Parlamentario del PRI en la sesión celebrada el Año Nuevo.
“Así como me los dieron yo los regresé. A partir de ahí ya ni Roxana ni nadie, absolutamente, se me ha molestado, pero antes sí se me molestaba por el voto al PRI”.
En el celular, dijo, traía los 300 mil pesos que le habían dado (se refería a unas fotografías).
“Diputado lo invito a enseñar ese video por si aparezco”, retó la diputada panista al responderle al legislador de Morena.
“¡Yo no sé de ningunos 300 mil pesos, por favor!”, manifestó al pedir el uso de la tribuna la diputada panista para defenderse de las acusaciones.
Como evidencia de sus dichos, el diputado Florentino Vizcarra levantó su brazo con celular en mano para mostrar que había tomado una foto de los 300 mil pesos.
La denuncia pública se produjo cinco meses después de que ocurrieron los hechos. El lunes 31 de diciembre, cuando estaba programada la discusión de la Ley de Ingreso y Presupuesto de Egresos 2019 enviada por el gobernador Quirino Ordaz Coppel, el diputado Florentino Vizcarra asistió a la sesión, pero no estuvo cuando se realizó la votación ya en la madrugada del primero de enero.
Había sido amenazado de muerte por un compañero, dijo en corto a Ríodoce cuando se le cuestionó sobre las razones que tuvo para no estar presente en la votación. Parco en sus respuestas, pero reacio a dar a conocer el nombre “del compañero” que lo había amenazado, dijo entonces que nunca había pensado que eso iba a sucederle al estar de diputado. Sobre el dinero recibido no pronunció entonces ni una sola palabra.
La coordinadora de la bancada de Morena, Graciela Domínguez, recuerda que ese día el diputado Vizcarra le explicó que tenía que irse porque estaba siendo muy presionado, pero desconoció a qué tipo de presiones se refería.
La escena de revelaciones sobre sobornos a diputados había iniciado cuando la diputada Roxana Rubio subió a pedir un punto de acuerdo para que la Auditoría Superior del Estado iniciara inmediatamente las denuncias sobre presuntos tráfico de influencias en los Ayuntamientos de Culiacán, Mazatlán y Ahome.
“¡Que incongruencia!”, le espetó en tribuna el diputado morenista Juan Ramón Torres Navarro a la diputada panista, por considerar que ahora estaba muy preocupada por la corrupción cuando ella había estado presionando al diputado Florentino Vizcarra.
Primer caso denunciado
La madrugada del primero de enero, el diputado de Morena, Pedro Villegas Lobo, fue el primero en hablar de sobornos en la actual Legislatura. “Yo pensé que era algo ficticio, me causa una impresión y nunca pensé que podría pasar, pero es increíble que lleguen a mi oficina y me diga una persona: te vamos a dar 100 mil pesos mensuales para que votes en contra de tu grupo parlamentario”.
Ese día Graciela Domínguez, líder de la bancada de Morena promovió ante el Pleno una propuesta de reasignación de recursos, diferente al proyecto original que había presentado el gobernador.
“Acaso con 100 mil pesos vale traicionar al pueblo, acaso 100 mil pesos vale la dignidad del pueblo, por supuesto que no”, dijo esa madrugada el diputado Villegas Lobo.
Hasta amenazas de muerte habían tenido que afrontar el Grupo Parlamentario de Morena, como el caso de un compañero que no había podido asistir, reveló entonces en tribuna.
Villegas Lobo denunció días más tarde que fue su compañero de bancada, el diputado Fernando Mascareño, quien lo había citado a su oficina y le hizo la propuesta de los 100 mil pesos.
Tras recibir el ofrecimiento, relató, que había ido con la coordinadora parlamentaria, Graciela Domínguez, quien no se sorprendió de conocer el ofrecimiento porque ya había otros diputados que les habían estado ofreciendo entre 50 mil y 100 mil pesos.
“Afortunadamente ninguno cedimos a este tipo de propuestas y seguimos firmes”, declaró los primeros días de enero en una entrevista para Ríodoce.
Al ser cuestionado el diputado de Morena, Fernando Mascareño, sobre las acusaciones, prefirió evadir los primeros días de enero cualquier pregunta y se refugió en el cubículo que ocupa en el Palacio Legislativo.
Graves los intentos de soborno
La coordinadora del Grupo Parlamentario de Morena, Graciela Domínguez, sostiene que los intentos de soborno a sus diputados es algo grave porque atenta contra la libertad de tomar decisiones al interior del Congreso del Estado.
Desde su perspectiva, lo delicado es que atentan contra la libertad política y democrática. “Si en el pasado esas eran las prácticas eso es lo que tenemos que buscar que termine. Qué bueno que el diputado se atrevió a hacerlo público porque con eso se está mandando el mensaje de que con ellos no se va a poder, aunque por un tiempo entendemos él se mantuvo callado por temores”, declara.
“No deja de llamar la atención que se intenta coartar la libertad que tiene un diputado”, ese es el problema que está en el centro, señala.
La líder de la bancada morenista cuestiona que hayan presionado a los diputados, a quienes considera como víctimas, para que no tomaran sus decisiones con libertad y debilitar al grupo parlamentario.
“Aquí habla la calidad moral y ética de cada quien en esta problemática, y que cada quien defienda esta ética y moral, finalmente el impacto negativo o positivo de esas prácticas se tienen en las decisiones que se toman en el Congreso”.
Domínguez Nava afirma que no ha recibido en lo personal ningún intento de soborno durante la presente ni la anterior Legislatura.
‘El soborno es una leyenda urbana’: PRI
El coordinador del Grupo Parlamentario del PRI, Sergio Jacobo Gutiérrez, calificó ridículas las acusaciones de los diputados de Morena que señalan que la diputada panista, Roxana Rubio, buscó persuadirlos de que votaran a favor de las propuestas del Grupo Parlamentario del PRI.
Además considera que la forma en que se presentó el señalamiento es totalmente infundada porque una foto en un teléfono celular no significa en ninguna parte la prueba de nada.
Se parte, indica, de un supuesto falso totalmente, de que para que haya consenso debe estar mediado “por eso”.
Declara que es absurdo estar estigmatizando cualquier acuerdo o coincidencias entre legisladores de distintos partidos políticos.
Los sobornos a diputados son mitos geniales y leyendas urbanas de la vida política porque nunca se han presentado pruebas fehacientes, asegura.
El líder de los diputados priístas enfatiza que es importante poner en contexto los señalamientos, porque se dieron cuando la diputada panista propuso un punto de acuerdo sobre acusaciones de nepotismo en gobiernos municipales de Morena, en donde ellos gobiernan, con la idea de poner una cortina de humo y distraer el tema central.
Es una calumnia, asegura Roxana Rubio
La primera reacción de la diputada panista Roxana Rubio tras las acusaciones recibidas durante la sesión ordinaria fue declarar que era sólo calumnias los señalamientos de los diputados de Morena.
“Es una foto de dinero, ahí no dice absolutamente nada”, sostuvo la panista, al referirse a la supuesta prueba de los 300 mil pesos que le habían entregado al diputado de Morena, Florentino Vizcarra a cambio de su voto.
En la siguiente sesión, acompañada del dirigente estatal del PAN, Sebastián Zamudio y respaldada por el coordinador de su bancada, Jorge Iván Villalobos, la diputada Roxana Rubio solicitó al presidente de la Mesa Directiva del Congreso del Estado, Marco César Almaral, se sancione al diputado por sus acusaciones sin pruebas.
“Estas conductas generan daño moral para mi persona. La falta de ética con la que se condujeron violenta la ética parlamentaria a la cual los diputados nos debemos apegar, quedando en evidencia la violencia política contra mí”, expresó.
Retó al diputado Florentino Vizcarra a que muestre las pruebas en donde ella entregó el dinero, pero de no tenerlas exigió una disculpa pública para ver si puede recuperar su honorabilidad como ciudadano.
Artículo publicado el 2 de junio de 2019 en la edición 853 del semanario Ríodoce.
