Diego Armando Maradona llegó a Dorados sin ganar nada como entrenador y tras culminar el Apertura 2018 de la Liga de Ascenso, concluyó de la misma manera.

Aún y cuando disputó la Final ante San Luis, el 10 no pudo levantar su primer trofeo en su carrera como técnico, al contrario, se le suma un fracaso más.

Mediáticamente, Maradona se ganó a la afición sinaloense y por qué no, hasta una que otra de todo el país.

Pero eso no le ayudará a Diego a conseguir campeones, sino que es más que eso.

Estuvo tres meses en Culiacán, por el momento, y lo mejor que hizo fue el show que había en cada partido, que desde luego, con eso se empezó a ganar a la gente.

Desde su llegada a México, muchos colegas arremetieron en contra de Maradona, a quien catalogaron que venía sólo de vacaciones y que no aportaría nada al futbol mexicano.

Y claro que así fue, por varias razones.

Mucha gente le da crédito a Maradona por haber puesto a Dorados en la final, pero no fue así. Atrás tuvo gente que hizo el trabajo. Gente de bajo perfil, pero de más experiencia que el exjugador argentino.

Y esos se llaman Luis Islas y Mario García, quienes gracias a ellos, el Gran Pez pudo levantarse hasta llegar a pelear por el título.

Desde luego que Maradona sí aportó, pero sólo como motivador, no hay más.

Después de terminar el torneo, se habla que Diego se quiere quitar la espinita y dio instrucciones a su representante firmar por todo el 2019 con Dorados.

Supuestamente en estos días se firmará el nuevo contrato, donde es casi un hecho que pedirá más billetes verdes.

Pero para estampar la rúbrica, ha pedido a varios jugadores para el siguiente torneo.

Se habla de su compatriota Carlos Tévez, actual jugador de Boca Jr., quien está complicado, pero por la historia de Dorados de contratar a jugadores mediáticos, pueden hacer el esfuerzo de llegar a un arreglo.

Hay varios más, pero eso lo dejaremos sobre la marcha, ya que lo veo más como un “borregazo”.

Lo que sí es un hecho, es que si Maradona sigue, tendrá que tener atrás a gente que le haga el trabajo, como Islas y García.

En fin, entonces hay que esperar a ver qué pasa con Diego y Dorados.

Columna publicada el 9 de diciembre de 2018 en la edición 828 del semanario Ríodoce.