Apenas esta mañana el gobierno del estado boletinó el apoyo gestionado por el Movimiento Amplio Social Sinaloense (MASS) a desplazados, cuando de nueva cuenta hay noticias que el abandono de pueblos continúa.
Fuentes federales revelaron que este jueves se desplazaron ocho familias más, que salieron de La Válvula y La Guayanera, poblados asentados en la sierra de Concordia.
En ambos lugares se han registrado enfrentamientos entre grupos armados y hallado personas asesinadas con armas de grueso calibre.
Aunque las autoridades han reiterado el cambio de estrategias y apoyos en materia de seguridad pública, la situación en esa zona del municipio no genera certidumbre a sus habitantes.
Hasta marzo, el censo estimado era de 500 familias desplazadas, pero según el secretario de Desarrollo Social (Sedesol), en Sinaloa, Raúl Carrillo Castaños, el 80 por ciento ya había regresado a Pánuco, Potrerillos, La Petaca, Santa Lucía, Chirimoyos y La Guayanera.
A cinco meses del incipiente logro, ocho familias se suman a la larga lista de desplazados asentados en Escuinapa, Rosario y colonias populares e irregulares de Mazatlán y su sindicatura de Villa Unión.
Agrupaciones como el Movimiento Amplio Social Sinaloense gestionan apoyos que contribuyan a mejorar la calidad de vida de esas familias.
El MASS abordó el tema de alimentación, vivienda, seguridad pública, empleo y proyectos productivos con la Comisión Intersecretarial de Atención a las Familias Desplazadas de la Zona Sur del estado.
El secretario de Desarrollo Social, Raúl Carrillo Castaños, encabezó un encuentro con Miguel Ángel Ramírez Jardines y Miguel Ángel Gutiérrez Sánchez, presidente y secretario de la Comisión Ejecutiva del MASS, respectivamente, para dar respuesta a las necesidades que plantean de manera coordinada, mediante el Plan de Reparación Colectiva, que marca el protocolo de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Para abordar el tema de seguridad pública, el Mayor Carlos Hernández Leyva, director de la Policía Estatal Preventiva, señaló que se cuentan con bases permanentes para garantizar la integridad de la población en La Petaca y Pánuco, en Concordia, así como elementos en Villa Unión, en Mazatlán, las cuales continuarán como parte del compromiso de restablecer la paz en estas zonas.
En cuanto a empleo, el secretario de Economía en la entidad, Javier Lizárraga Mercado, acompañado del director del Servicio Estatal de Empleo, Arturo Torres Sato, atendieron la solicitud de agilizar 33 créditos de financiamiento para que los desplazados puedan contar con un ingreso digno para sus familias, a través de un negocio.
Al respecto, el titular de SEDECO dijo que confía que la apertura de grandes industrias en el sur del estado puedan generar empleo para las familias desplazadas, así como en la autorización de recursos para microcréditos con enfoque social, existiendo actualmente una derrama de 511 millones de pesos en lo que va del actual Gobierno, contra 540 millones que se aprobaron en el anterior sexenio.
En cuanto a vivienda, el secretario de Desarrollo Sustentable, Álvaro Ruelas Echave y Salvador Reynosa Garzón, director del INVIES, acordaron revisar la necesidad de vivienda de las familias desplazadas, para acorde a sus solicitudes diseñar una estrategia integral de respuesta para que tengan un patrimonio.
Los representantes del MASS recibieron actas de nacimiento previamente gestionadas y se registraron solicitudes de apoyo para las cuotas de inscripción al ciclo escolar.