El papa Francisco aceptó la renuncia de Theodore McCarrick, un prominente cardenal de Estados Unidos acusado de asaltar sexualmente a un adolescente hace casi 50 años.
Con 88 años, el exarzobispo de Washington, también fue suspendido de sus deberes públicos a la espera de un juicio canónico, informó El Vaticano.
A McCarrick se le acusa de haber asaltado a un adolescente cuando se desempeñaba como un sacerdote en Nueva York, a comienzos de los 1970. Las acusaciones fueron hechas públicas en junio por el actual arzobispo de Nueva York, cardenal Timothy Dolan.
El mes pasado, las autoridades eclesiásticas estadounidenses afirmaron que las acusaciones eran creíbles. McCarrick dijo que no tiene “recuerdo alguno” del supuesto abuso. Otros alegatos han salido a la superficie desde entonces.
McCarrick era uno de los cardenales más destacados de EE.UU. y uno de los líderes católicos de más alto perfil en enfrentar acusaciones de abuso sexual.
“El papa Francisco aceptó la renuncia del cardenalato y ha ordenado su suspensión del ejercicio de cualquier ministerio público, con la obligación de permanecer recluido en una residencia que está por indicarse, para seguir una vida de oración y penitencia hasta que las acusaciones en su contra sean examinadas por un tribunal regular canónico”, según un comunicado del Vaticano.
Dijo que una agencia forense independiente había investigado las acusaciones. Una junta de revisión, incluyendo a expertos legales, psicólogos, padres de familia y un sacerdote, encontraron las acusaciones “creíbles y corroboradas”.
