El presidente Donald Trump cedió ante la presión internacional que cuestionó la política de “Tolerancia Cero”, que ha separado a miles de familias y llevado a niños a refugios temporales, donde se encuentran entre rejas, y firmará un acuerdo para que los menores se queden con sus padres.
“Vamos a firmar una orden ejecutiva dentro de poco (…) Tenemos que mantener a las familias juntas”, señaló el magnate norteamericano en un encuentro con legisladores, de acuerdo a Reporte Índigo.
Funcionarios de la Casa Blanca señalaron que la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, ya se encuentra elaborando la acción ejecutiva para que el Presidente ordene mantener juntas a las familias después de que sean detenidas cruzando la frontera de manera ilegal.
Asociaciones civiles denunciaron que la política “Tolerancia Cero” da trato de criminales a los migrantes y si los menores se quedan con sus padres detenidos durante el proceso de deportación podrían ser tratados de la misma manera.
Trump afirmó que con su medida preventiva el Congreso acabará aprobando una nueva legislación sobre el tema.
Por su parte la prensa de Estados Unidos adelantó que Trump está considerando que los niños puedan estar con sus padres en los centros de detención durante un plazo de tiempo más amplio.
En 1997, el gobierno norteamericano firmó con dos organizaciones humanitarias el acuerdo conocido como “Flores”, en el que se específica que los menores detenidos en la frontera solo pueden ser privados de libertad durante 20 días, por lo que el nuevo tratado que firmaría Trump sería contrario a este previo.
Según cifras oficiales de migración en Estados Unidos, al menos 2 mil 342 niños han sido separados de sus padres entre el 5 de mayo y el 9 de junio.
En Estados Unidos esta política de “Tolerancia Cero” está siendo usada por el gobierno de Trump como moneda de cambio para obtener una nueva ley migratoria. El magnate acusa a los legisladores demócratas de la separación, ya que su bancada no aprueba la nueva reforma migratoria.
Esta crisis ha ocasionado indignación mundial y los hechos han sido condenados por el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos Zeid Ra’ad Al Hussein.
Por su parte en México, apenas el día de ayer el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray condenó la política de separación de familias migrantes.
Los cuatro candidatos a la Presidencia de México ya condenaron los hechos, incluso Ricardo Anaya comparó al presidente estadounidense con Adolfo Hitler.
Tanto en territorio nacional como en estadounidense, asociaciones civiles organizan protestas en contra de las políticas migratorias de Trump.
Bajo el lema “Las familias deben de permanecer juntas” organizaciones sociales llaman a una concentración para el día de mañana a las 16:00 horas frente a la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México.
El mismo día y a la misma hora se llevará a cabo otra concentración en la Plaza Cívica de Walnut Creek, Oakland, en California.
Un día antes de las elecciones presidenciales en México, el sábado 30 de junio, la asociación Deportados Unidos en la Lucha organizó una nueva protesta frente a la Embajada
Ese día la manifestación será replicada en Estados Unidos, en La Placita en Washington DC y en el Curtis Hixon Waterfront Park en Tampa, en Springfield, Florida, Palm Springs, Tucson, Denver y Seattle.
