El presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) de la Universidad de Guadalajara, Jesús Medina Varela, dio a conocer que la ayuda que se pidió al 911, luego de que tres estudiantes de cine fueron “levantados” el pasado lunes 19 de marzo, llegó más de tres horas después.
Aseguró que aunque “la publicidad oficial va a decir que todo va bien” en el estado, la realidad es que “los desaparecidos se cuentan por miles. Este es el tercer estado de la República que más desaparecidos tiene y nunca había cobrado visibilidad y había estado lastimando lentamente a la sociedad”, relató en una entrevista con la periodista Carmen Aristegui.
“Aquí en Jalisco, actualmente, según cifras del Instituto Jaliscience de Ciencias Forenses, tan solo en lo que va del año van 463 autopsias por muertes violentas: 327 por arma de fuego, 33 por arma blanca, 30 por golpes, 73 por estrangulación… de estas 463, 161 tan solo en el mes de marzo, estamos hablando de que en un promedio de cerca de 3 horas están asesinando a una persona aquí en nuestro estado”, detalló en #AristeguiEnVivo.
En tanto, en 2017, “para los estudiantes fue un año brutal”, pues documentaron que hubo 500 estudiantes golpeados, lastimados o robados, en inmediaciones a los planteles de la Universidad de Guadalajara; siete fueron acuchillados para quitarles su teléfono celular, de los cuales dos perdieron la vida. Además, hace 15 días a una compañera que salió de la facultad de derecho le dieron un balazo en la frente “a sangre fría”.
En este contexto se dio la desaparición de Javier Salamón Aceves Gastélum, Marcos Ávalos y Daniel Díaz, quienes cursaban la carrera de cine y fueron levantados en Tonalá, cuando regresaban de grabar un video.
Respecto a ese caso, reveló que les “preocupa profundamente” que al revisar unos videos notaron que aunque hubo una llamada al 911 pidiendo auxilio, la ayuda llegó hasta más de tres horas después, por lo que preguntó: “¿qué pasó en esas 3 horas y media? Hay una gran omisión que debe ser sancionada”.
En cuanto al hallazgo del cuerpo de César Ulises Arellano, estudiante de la UdeG, señaló que “fue muy aventurado declarar a cuatro horas de que lo encuentran, especulando o afirmando que pudo haber sido suicidio”.
Consideró que esa hipótesis pueden usarla también con los estudiantes de cine, por lo que advirtió: “No vamos a permitir que se les criminalice”.
