Transportistas denuncian cobro de cuotas y bloquean camiones en Los Mochis

BLOQUEO. De transportistas

Hartos de la simulación oficial en la Dirección de Vialidad y Transporte para hacer respetar la ley vigente y ante las presunciones fundadas de que se cobra “piso” a transportistas piratas para permitir el desplazamiento de las alianzas concesionadas, permisionarios de carga en general del norte de Sinaloa conformaron un bloque anticorrupción y se movilizaron para defender su derecho al trabajo lícito.

José Antonio Chinchillas, dirigente de la Alianza de Permisionarios del Valle del Fuerte; José Luis Bernal Barreras, presidente de la Cooperativa de Carga; Plinio Castro Sosa, presidente de la Alianza de Carga, y respaldados por Francisco Javier Luna Bejarano, presidente de la Alianza de Transportadores de Materiales de Construcción y Similares del Norte de Sinaloa, espetaron al delegado de Vialidad en esta ciudad, Hugo Leal Sañudo, la simulación en que incurren los inspectores de transporte al no sancionar a camioneros que equipados con doble jaula, trasladan fertilizantes de las bodegas a centros de acopio sin tener autorización oficial.

“Les hablamos y nada más no acuden. Y ya de plano, no responden o apagan el teléfono. Cuanto caso conocemos se lo decimos a Erick (Flores Lugo, asesor jurídico de Vialidad) pero tampoco hace nada. Estamos invadidos de ‘piratas’ porque ustedes no hacen nada”, coincidieron los dirigentes ante Hugo Leal.

“¿Por qué, delegado; por qué ese ataque contra nuestra fuente de empleo; por qué tanto poder a un asesor jurídico para gobernar a los inspectores; y por qué usted no tiene esa autoridad?”, le lanzó a quemarropa José Luis Bernal.

Leal dio una respuesta lacónica: “No sé, pregunten en Culiacán, al director”.

Los transportistas se enfurecieron, y continuaron con un rosario de reclamos. Desde la espalda de los dirigentes, los concesionarios gritaban que atrás de todo estaba la corrupción, dinero como cuota mensual que se exigió para protegerlos de la invasión de zonas de trabajo y al no pagarse, los inspectores se hicieron de la “vista gorda”, operando inspecciones simuladas, y realizando retenes “fantasmas”.

Y la prueba, respaldaron y expusieron los dirigentes, está en las bodegas de la Unión de Ejidos de Producción Agropecuaria (Uepic) del Valle del Carrizo, de donde la empresa Terminel transporta fertilizante a Guasave; y en la zona industrial Santa Rosa, la empresa Pacifex permitió a la transportadora GLS, cargas de  fertilizante para llevarlo a Culiacán, aduciendo que el transporte está liberado. Esos camiones también fueron bloqueados.

“Desde el sábado estamos haciendo su trabajo, bloqueando los camiones con carga, esperando a los inspectores, pero nunca llegan”.

En respuesta a la inmovilización, Terminel y su grupo jurídico arribó con funcionarios de la Fiscalía de Justicia de Sinaloa protegidos por policías, quienes por la fuerza destrabaron los camiones y permitieron el libre tránsito. Eso incluía doble remolque de jaulas que aunque están prohibidas se les permitió la circulación en carreteras locales y federales.

En tanto, en la zona industrial Santa Rosa, el jefe de cuadrilla de GLS maniobró para burlar el bloqueo, pero en la corrida fue alcanzado por algunos choferes, quienes procedieron a inmovilizarlo. Encolerizado, el sujeto tomó un bat corto utilizado como “checallantas” y atacó a Gabriel Reyes, descalabrándolo.

Gabriel fue auxiliado por policías preventivos de Ahome, suturado y hospitalizado en el nosocomio “Jesús Kumate García”. En tanto, el transportista agresor escapaba al sur sobre la carretera Internacional.

Ante el cúmulo de pruebas en su escritorio, tartamudeando, entre molesto y nervioso, Hugo Leal  Sañudo dijo que actuaría en contra de las empresas que violenten la ley del transporte y ofreció enviar inspectores. “El transporte no está liberado, y todavía es necesario un permiso para cargar. Quien no lo tenga no debe trabajar, y será multado”.

Los transportistas le gritaron: falso, mentiroso, corrupto. No obstante, abrieron un compás de tiempo para que el delegado ordenara las sanciones.

Al caer la tarde, los camioneros se retiraron; no sin antes advertir que en cuanto los inspectores sean omisos tendrá un nuevo plantón, pero esta vez más grande, con mayor afectación.

ENCARAN. A delegado de Vialidad.

Cierran la carretera a Topo

Unas 12 horas después del primer plantón en Vialidad y de dos bloqueos en centros de trabajo, decenas de dompes de la Alianza de Camioneros Trasportadores de Materiales de Construcción y Similares del Norte de Sinaloa paralizaron la segunda fase de la reconstrucción de la carretera Los Mochis-Topoloabampo, porque las concreteras Gusa, propiedad del ex funcionario municipal, Miguel Ángel Gutiérrez Bazúa, y Calsa, de Martín López Mendívil, director del Comité Regional de Promoción Económica Zona Norte del Consejo para el Desarrollo Económico de Sinaloa —ambos empresarios ligados al staff del grupo político del ex gobernador Mario López Valdez—pretendieron desplazarlos del acarreo de materiales para la obra.

El conflicto ya se le había anticipado al delegado de Vialidad, Hugo Leal, y al entonces alcalde Álvaro Ruelas Echave. El primero echó en saco roto las advertencias y el segundo se encogió de hombros.

A rajatabla, los empresarios ofrecieron desplazar totalmente a los concesionarios de la obra, con el argumento de que el transporte había sido liberado y que ellos habían ganado la licitación.

Ante la respuesta, los concesionarios bloquearon los dompes de los empresarios. Parada la obra, un inspector multó a uno de los camioneros privados por prestar servicio público sin permiso. El otro, tenía vigente un permiso particular.

No obstante, Luna Bejarano, presidente de la alianza, afirmó que la multa no era la solución al conflicto, sino la distribución del trabajo, puesto que estaban dispuestos a compartirla pese a que la ley les otorga la carga intacta.

En respuesta, los empresarios contra ofertaron: otorgan el 60 por ciento del acarreo de materiales, siempre y cuando les descuenten el 15 por ciento de la tarifa vigente y seis meses para pagar.

“La rechazamos inmediatamente, por ventajosa”, afirmó Luna Bejarano, y agregó que “una solución sería un 80-20, pero la rechazan”. Si no hay acuerdo, no hay obra. Así de simple es la situación, aclaró Luna.

GABRIEL REYES. Herido en Santa Rosa.

 

‘No hay conflicto camionero’: Miguel Luna

Miguel Luna Ley, presidente de la Federación de Transportistas de Sinaloa categórico dijo que en Sinaloa no hay conflicto camionero y que las sospechas de corrupción en la Dirección de Vialidad y Transporte se habían disipado.

Aseguró que las relaciones entre los permisionarios y funcionarios son tersas, amigables.

Descartó que transportistas “piratas” estén desplazando a los concesionarios “porque entre ambos hay acuerdos”.

Luna Ley minimizó los conflictos por la disputa de trabajo: “Son mínimos, muy pocos, casi nada”.

La postura del dirigente no extrañó a los concesionarios, pues de acuerdo con éstos es ya conocido que dejó de representar los intereses de los camioneros y le sirve a los empresarios.

“A cuanta reunión convoca ofrece negociar, interceder entre las partes, en lugar de defender a su sector. Por eso, nada más lo escuchamos. Allá él”, afirmaron.

Entrevista publicada el 28 de enero de 2018 en la edición 783 del semanario Ríodoce.

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