Perdiendo por la mínima al 88′. la Fiera resurgió y se llevó los tres puntos ante unas Águilas que siempre propusieron.

Estadio León, León – En menos de tres minutos, el León sacó las garras para arrebatarle al América, de manera trepidante y agónica, una victoria que ya se saboreaba.

Las Águilas pasaron de la ilusión de los tres puntos a las manos vacías de la derrota. Las Águilas visitaron León, donde gran parte del tiempo estuvieron arriba por 1-0, hasta que al 88’ sufrieron el empate y en la compensación recibieron el gol de la derrota.

Mauro Boselli mantuvo la tradición. El argentino que ha hecho del América a su víctima favorita, porque ha sido el equipo al que más le ha marcado goles en México, le estropeó la noche a las Águilas en su visita al León, ya que marcó el 1-1 a dos minutos de que terminara el tiempo reglamentario.

Antes, los de Coapa se fueron arriba con un remate del defensa Pablo Aguilar, al minuto 54 con un remate de cabeza en jugada a balón parado, con lo que reflejaban su dominio. Sin embargo, al final ambos equipos pudieron llevarse los tres puntos, con unos últimos instantes de ida y vuelta y llenos de emoción.

Pero fue la Fiera quien al 92’ marcó el 2-1 con un remate de taquito de Hernán Burbano, quien había entrado de cambio, luego de un tiro de esquina que enloqueció al Estadio León en el regreso del futbol a su plaza, para así llegar a 16 puntos y acomodarse en zona de Liguilla, además de dejar al América en 17 unidades, en segundo lugar pero a merced de varios escoltas.

Los esmeraldas llegaron a tres victorias en fila, pero no sin sufrir. Antes de que terminara el primer tiempo, el América avisó con un disparo de Darwin Quintero que pegó en el poste. Tras ello cayó el gol de Aguilar que provocó la reacción local.

El León se dedicó a buscar el tanto del empate y arriesgó dejando espacios atrás, yendo al ataque con más ímpetu que buen funcionamiento. Nunca logró hilvanar una jugada que le permitiera llegar con peligro a la portería de Marchesín, más que en centros a pelota parada.

Las Águilas recularon hacia su portería e intentaron rematar el duelo aprovechando la velocidad de su ofensiva, a través de contragolpes. Pero la fórmula no les fiuncionó y en una de esas jugadas, con el ánimo desbordado, cayó el remate de Boselli, provocando el estallido de euforia de la afición.

Ya sobre el 93’, y en otro centro por la banda de la derecha, mismo lado donde nació el centro que remató Boselli, Burbano remató para darle la victoria al León.