Ante la advertencia de la Mesa Directiva de que si la concurrencia no guarda silencio, la sesión ordinaria podría decretarse secreta, esta fue reanudada con el posicionamiento de los grupos parlamentarios.
El presidente de la Mesa Directiva anunció que dos diputados votaron por seguir con la sesión y cuatro por continuar con el carácter de secreta, si se sigue con el desorden en el graderío.
Los diputados integrantes de la Mesa Directiva se levantaron de sus curules de la tribuna legislativa, situación que fue enfatizada por la líder priísta, porque no se respetó el acuerdo.
Más tarde en conferencia de prensa, el diputado panista Roberto Cruz reveló que fue la legisladora del PRI, Maribel Chollet quien propuso hacer uso de su voto ponderado para transformar la sesión en secreta, sin la asistencia del público, con el apoyo de Alba Virgen del PAS y Guadalupe Iribe del PRI, mientras que él y el diputado del PANAL, Jesús Ibarra votaron en contra.