En el Poder Legislativo se vive en un oasis presupuestal. No existe crisis, ni recortes, menos escasez de recursos. Es el mundo de la abundancia, mientras que a nivel estatal, nacional e internacional se dibujan escenarios económicos complicados.

A menos de un mes de haber  tomado protesta como integrantes de la nueva legislatura, 30 de los 40 diputados hicieron maletas para viajar con gastos pagados por el Poder Legislativo a Morelia, a la novena Conferencia Permanente de Congresos Locales (Copecol).

La organización del  viaje motivó, en la 62 Legislatura, el primer desencuentro acalorado en tribuna cuando el diputado de Morena, Jesús Rendón Sánchez, cuestionó a sus compañeros legisladores sobre el viaje a Morelia por considerarlo  “turismo político”  y un ofensivo derroche de recursos públicos  en medio de una situación económica de emergencia en la que se encuentra Sinaloa y México.

De acuerdo con las cuentas del Grupo Parlamentario de Morena, en el viaje de 38 diputados se gastarían 640 mil pesos, versión que al día siguiente desmintiera la presidenta de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), Irma Leticia Tirado Sandoval, al precisar que  viajarían solamente 30 legisladores y que el gasto total sería de 290 mil pesos.

En realidad el costo del viaje sería un gasto menor, si se compara con los egresos en otros rubros. Por ejemplo, los integrantes de la JUCOPO, entre dietas y otros apoyos legislativos, representan una erogación mensual de un millón 725 mil pesos, lo que equivale a casi seis veces los gastos del viaje de los 30 diputados a Morelia.

La dieta de un diputado es moderada. De acuerdo con los datos oficiales del Congreso del Estado, el monto de la dieta mensual por cada legislador es de 52 mil 369 pesos antes de impuestos. Si se restan los impuestos, unos 9 mil 871 pesos, quedaría un ingreso por concepto de dieta de 42 mil 498 pesos. Pero esos no son los únicos ingresos.

En la dieta mensual de cada uno de los 40 diputados se debe sumar además un fondo de ahorro de 30 mil pesos, aguinaldo por 4 mil 521 pesos y una prima vacacional de 48.79 pesos. Hasta ahí el ingreso asciende a 86 mil 939.77 pesos.

Durante la primera sesión ordinaria de la actual Legislatura, el Grupo Parlamentario de Morena, en voz de su coordinadora, la diputada Merary Villegas Sánchez, anunció que donarían el 50 por ciento de su salario como diputados para destinarlo a educación.

Esto incluso motivó que al interior del Grupo Parlamentario del PAN se calificara el posicionamiento de Morena como una actitud populista. Más tarde la diputada de Morena precisaría que la donación se haría sobre el salario de un diputado, no sobre otros de los ingresos que se percibirán como legisladora.

Además de la dieta, un diputado del Congreso del Estado de Sinaloa recibe apoyos mensuales por diversos montos para el desarrollo de sus funciones. La presidenta de la JUCOPO declaró que serán los mismos que se entregaban desde la anterior Legislatura.

Con base en los datos difundidos en el portal oficial del Poder Legislativo respecto a la remuneraciones, cada uno de los 40 diputados  recibe mensualmente 12 mil 500 pesos por concepto de transportación,  como también 15 mil pesos adicionales para gastos de combustible, los cuales deben comprobar.

Para los diputados que tienen su residencia a más de 50 kilómetros de Culiacán, se les otorga adicionalmente un apoyo mensual de 12 mil pesos para hospedaje y alimentos.

Dentro de la lista de montos de apoyos, cada uno de los diputados dispone cada mes de una partida de 70 mil pesos mensuales “para repartir”, ya sea en efectivo o en especie. El monto está dividido en dos conceptos “gestoría social” y “fondo de gestión social”. Los diputados no atinan a explicar cuál es la diferencia, pero saben que pueden disponer de esta cantidad que deben comprobar con oficios y respaldos de que repartieron el dinero entre la gente que se les acerca para pedirles apoyos.

Globalmente la Legislatura “reparte” en apoyos a la gente, dos millones 800 mil pesos, lo que equivale a 33 millones 600 mil pesos anuales.

En total, cada uno de los diputados recibe en apoyos 109 mil 500 pesos. Esa es la cantidad que en la Legislatura 61 se entregó cada mes, y serán las mismas cantidades que se entregarán a cada diputado en la Legislatura 62.

Hasta aquí las operaciones matemáticas dirían que los ingresos de cada uno de los 40 diputados locales de Sinaloa es por un total de 196 mil 439.77 pesos, pero la suma no termina aquí.

Francisco Rodríguez Ontiveros, jefe del Departamento de Contabilidad del Congreso del Estado, informó vía solicitud de Acceso a la Información, que los ocho integrantes de la JUCOPO reciben un ingreso adicional de 10 mil pesos mensuales para el desarrollo de su trabajo. Así, estos ocho diputados tienen ingresos por 206 mil 439.77 pesos.

Además, el incremento de ingresos del grupo selecto de diputados que integran la JUCOPO, está el que perciben los cinco coordinadores de los grupos parlamentarios del PRI, PAN, PAS, Nueva Alianza y Morena.

Cada uno de ellos recibe 20 mil pesos adicionales. En total son 226 mil 439.77 pesos, menos la coordinadora de Morena, quien recibiría 200 mil 255.15 pesos, si se le disminuye el 50 por ciento de los ingresos por concepto de dieta como legisladora.

Los diputados salientes comunicaron verbalmente a los entrantes la versión de que existía entrega de apoyos adicionales a los diputados que presidían las comisiones permanentes, entre 12 mil y 15 mil pesos, por lo que empiezan a buscar se les contemple ese ingreso. Oficialmente, el Departamento de Contabilidad niega que los presidentes de las comisiones reciban una prestación extra, aunque existía la percepción en la anterior Legislatura que había apoyos discrecionales entregados por el líder a la JUCOPO.

Es un hecho que los titulares de  las comisiones de Fiscalización, Puntos Constitucionales y Gobernación, así como Hacienda, tiene un trato “VIP”. Son las únicas comisiones que cuentan con personal de apoyo y oficinas propias, entre otras facilidades. El resto de comisiones solo dispone de apoyo de viáticos cuando se requiere.

La actual titular de la JUCOPO coincide con la versión del Departamento de Contabilidad en el sentido de que no existe entrega de un bono adicional a los  diputados que son presidentes de comisión.

Asesores, prestación adicional

Adicionalmente cada uno de los 40 integrantes de la Legislatura cuenta con una partida asignada de 69 mil 259.20 pesos para el pago o contratación de asesores, lo que representa un gasto mensual de 2 millones 770 mil pesos para el Poder Legislativo.

A la fecha ningún diputado de la nueva Legislatura ha rechazado el uso de esta partida para la contratación de asesores. En promedio, desde la anterior Legislatura, cada uno de los legisladores acostumbra tener en promedio tres asesores, pero ahora la presión interna es para incrementar el presupuesto y entre un asesor extra.

La lista de asesores que serán contratados está en construcción, pero es evidente la presencia de una nube de colaboradores que acompañan a los Legisladores; más que asesores son asistentes, secretarios particulares y fotógrafos personales.  En cada sesión, los colaboradores de los nuevos diputados invaden el área de curules, tropezando entre sí,  en busca de la foto de cada movimiento de su diputado, o las butacas de la sala de sesiones al pendiente de cualquier necesidad de su jefe. Los nuevos “asesores” invaden el área de prensa y el área de cafetería contigua, al grado que el personal de planta a cargo de estos espacios ha sugerido internamente se pida a los nuevos diputados controlen la conducta de sus colaboradores para evitar el caos.

De acuerdo con información proporcionada por Teresita de Jesús Morales Tirado, jefa del Departamento de Recursos Humanos, vía Infomex, el Congreso del Estado tenía  en la nómina por honorarios asimilados a salarios como asesores, auxiliares y secretarios técnicos a un total de 120 personas, durante la 61 Legislatura.

Los ingresos del personal contratado por los diputados suele ser totalmente dispar. En la anterior legislatura había personas con ingresos definidos desde 5 mil pesos y otros hasta por 45 mil pesos mensuales.

De acuerdo con la Ley Orgánica del Congreso del Estado, el artículo 18 referido a los derechos de los diputados, no incluye específicamente el contar o contratar a personal administrativo o asesores para el desarrollo de sus actividades, sino como parte de un derecho de los Grupos Parlamentarios; tampoco el de administrar un presupuesto para distribuirlo entre la gente, sino de gestionar ante las autoridades competente la solución de problemas.

El resquicio de la ley es que dentro de los derechos de cada legislador está el de percibir dietas, asignaciones y prestaciones conforme al presupuesto de egresos del Congreso del Estado. Y como son los propios diputados quienes se aprueban el presupuesto, el asunto tiene luz verde garantizada.

NÓMINA DE ÉLITE LEGISLATIVA

*Se considera el 50% de la dieta como diputada, a la que renunció para donarla a educación.

INGRESOS VIP*

*Cuadro elaborado con datos oficiales del Congreso del Estado obtenidos mediante solicitud Infomex.

El alboroto por el viaje

Cuando el diputado de Morena,  Jesús Baltazar Rendón, subió a tribuna para leer su posicionamiento sobre una iniciativa presentada por su Grupo Parlamentario sobre una Ley de Austeridad, Gasto Eficiente y Remuneraciones de Servidores Públicos, parecía que el asunto no pasaría a mayores, pero encendió los ánimos cuando expresó que no irían la reunión de COPECOL porque consideraban que el Poder Legislativo hacía un derroche de recursos y lo reducía a un mero “turismo político”.

La austeridad y el gasto eficiente, les dijo a su compañeros diputados, deben ser hechos concretos y no simples posicionamientos que solo buscan ganar una nota periodística.

La diputada priísta Fernanda Rivera Romo fue de las primeras en defender los motivos del viaje: “No es un tour turístico, sino capacitación para responder con mayor eficiencia a los gobernados”.

Le seguiría el diputado de Nueva Alianza, Crecenciano Espericueta Rodríguez, quien enfatizó que iban a prepararse. Los gastos de hospedaje y alimentación de los asistentes corren a cargo del Gobierno del Estado de Michoacán, argumentó, y pidió al diputado de Morena que no criticara nada más por criticar. Y aprovechó de paso el momento para anunciar que planeaba ir a una reunión internacional sobre educación a Monterrey.

Los señalamientos provocaron que la coordinadora del Grupo Parlamentario del Morena, Merary Villegas Sánchez, subiera a tribuna para aclarar que no estaban en contra que los diputados viajaran para capacitarse, sino que lo hicieran cubriendo los gastos con sus propios recursos. “No estamos de acuerdo que esas capacitaciones le cuesten al pueblo”.

El diputado priísta Carlos Montenegro pidió también el uso de la tribuna para defender los motivos de viajar a Michoacán.

De nuevo la diputada de Morena subió a tribuna para retar a que se consultara al ciudadano  que opinaba de que pagara por el viaje de capacitación a Morelia.

El episodio lo remataría la diputada Maribel Chollet, quien calificó como penoso el espectáculo cuando se suben a debatir temas intrascendentes.

“No le permito señora diputada o señorita, desconozco su estatus personal, suba aquí a demeritar el trabajo de la capacitación a la que todos tenemos derecho”, soltó la legisladora.